El Ayuntamiento de Tarragona está elaborando un censo municipal para descubrir cuántos elementos de la ciudad contienen amianto. De este documento se desprende que Tarragona deberá eliminar 554 cubiertas, 134 kilómetros de tuberías de abastecimiento de agua y 49 agrupaciones de elementos en edificios de titularidad municipal que contienen fibrocemento. La fecha límite es el año 2028 para las construcciones de carácter público y el 2032 para el resto, según los objetivos de la Unión Europea (UE).
La Ley 7/2022, de 8 de abril, de residuos y suelos contaminados para una economía circular prevé que, en el plazo de un año desde su entrada en vigor –abril de 2023– los ayuntamientos elaboren un censo de instalaciones y emplazamientos con amianto, incluyendo un calendario que planifique su retirada. Tanto el censo como el calendario deben ser remitidos a las autoridades sanitarias, medioambientales y laborales competentes de las respectivas comunidades autónomas.
El Ayuntamiento está elaborando un censo municipal para descubrir cuántos elementos de la ciudad contienen amianto
Las estadísticas de la Generalitat indican que tan solo el 7% de los entes municipales han enviado el censo de forma total, mientras que el 21% lo ha hecho parcialmente y el 72% no lo ha enviado. Este documento es el que está elaborando el consistorio.
Hasta el momento, se han recogido datos de los edificios municipales y de algunas administraciones que las han facilitado, como por ejemplo, la Autoritat Portuària de Tarragona (APT) o el Instituto Nacional de la Seguridad Social. Además, la Generalitat proporcionó indicadores de cubiertas con fibrocemento detectadas mediante un estudio realizado por el Institut Cartogràfic de Catalunya.
El censo tarraconense se irá ampliando a medida que se tenga constancia de más elementos en la ciudad
Todo ello se ha incorporado en un sistema de información geográfica y, en términos generales, el Ayuntamiento confirma que se han detectado los siguientes elementos con posibilidad de contener amianto: 49 agrupaciones de elementos en edificios de titularidad municipal, 134 kilómetros de tuberías de abastecimiento de agua y 554 cubiertas con fibrocemento.
El censo tarraconense se irá ampliando a medida que se tenga constancia de más elementos en la ciudad. Para el público en general, la Generalitat dispone de un visor público donde se encuentran las cubiertas detectadas.
«Se realizará una estimación del coste de la retirada, así como un calendario para establecer prioridades», concejal de Urbanisme, Llicències, Domini Públic y Patrimoni, Nacho García
«En cuanto a la valoración del precio de las actuaciones, desde el Ayuntamiento se realizará una estimación del coste de la retirada, así como un calendario para establecer prioridades y comenzar a invertir, especialmente en aquellos edificios con uso público», comenta el concejal de Urbanisme, Llicències, Domini Públic y Patrimoni, Nacho García Latorre.
Las estadísticas en la provincia
Tarragona no es la ciudad de la demarcación con peores datos en cuanto a cubiertas con elementos de fibrocemento. De hecho, por su tamaño, los registros son relativamente buenos, teniendo en cuenta que Reus cuenta con 1.190, Tortosa con 1.160, Ulldecona con 1.007, Deltebre con 825 y Amposta con 762. En el conjunto de la demarcación, son unas 20.000, por las 124.100 que hay en toda Catalunya.
Reus cuenta con 1.190 cubiertas de fibrocemento, Tortosa con 1.160, Ulldecona con 1.007, Deltebre con 825 y Amposta con 762
Recientemente, y con la intención de disponer de un único marco normativo que permita abordar de manera integral y acelerar la retirada de este material, nocivo para la salud, el Govern de la Generalitat de Catalunya ha aprobado el proyecto de Llei per l’Erradicació de l’Amiant a Catalunya. Ahora, el Ejecutivo de Salvador Illa (PSC) enviará el proyecto al Parlament para su debate y aprobación a lo largo del año 2025.
Así pues, esta ley tiene como objetivo establecer un marco jurídico que permita una actuación común por parte de todas las administraciones públicas de Catalunya con el fin de combatir los efectos nocivos que el amianto produce sobre la salud.
Recientemente, el Govern de la Generalitat de Catalunya ha aprobado el proyecto de Llei per l’Erradicació de l’Amiant a Catalunya
Uno de los aspectos más destacados es la previsión de colaboración entre la Generalitat y el resto de administraciones públicas catalanas, especialmente los ayuntamientos. En este sentido, se contempla entregar a cada ayuntamiento las actualizaciones del mapa de cubiertas con fibrocemento de su término municipal, ofrecer actividades formativas descentralizadas y brindar atención personalizada a los técnicos de las administraciones.
Además, esta normativa debe promover la coordinación y cooperación entre todas las administraciones públicas para acelerar al máximo la retirada del amianto, así como fomentar la información y la sensibilización de la ciudadanía y de las personas trabajadoras sobre los efectos nocivos del amianto y la necesidad de una gestión adecuada y de una retirada más rápida.
