La propuesta para adjudicar el nuevo contrato de la basura a Urbaser ha superado este viernes el primer filtro: la comisión previa al pleno de la próxima semana. La suma de PSC, Junts y los dos concejales no adscritos ex de Vox ha permitido que el punto del orden del día fuera primero admitido de urgencia y, posteriormente, avalado para poder ser debatido dentro de seis día en el Saló de Plens.
El acuerdo que propone el gobierno municipal socialista, a instancias de los servicios jurídicos, es «quedar assabentats de la resolució del Tribunal Català de Contractes del Sector Públic i donar compliment a la resolució».
De esta forma, Secretaria General considera que el Ayuntamiento podrá superar el obstáculo que supuso la exclusión de la ganadora del concurso –GBI Paprec– y adjudicar el servicio más elevado del consistorio (233 millones de euros en diez años) a la segunda clasificada sin tener que reiniciar todo el proceso.
¿Mayoría estable?
Tras la tensa Junta de Portaveus del pasado jueves, especialmente entre el alcalde Rubén Viñuales (PSC) y Jordi Collado (ECP), la comisión de este viernes ha discurrido por unos cauces más normalizados, en los que el ejecutivo de la Plaça de la Font ha logrado sumar mayoría tras atraer al «sí» a los dos exediles de Vox, además de su socio más fiel de este mandato: Junts. ¿Se trata de una nueva mayoría estable de cara al segundo año de mandato? El tiempo, las ordenanzas y los presupuestos dictarán sentencia a medio plazo.
Especialmente crítica se muestra la portavoz de ERC, Maria Roig. «Votaremos que no. Es incomprensible que, habiendo un informe municipal que manifiesta que la actuación de la Mesa fue impecable y en el que se discrepa de la decisión del tribunal, el Ayuntamiento no presente un recurso ante el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya. Si las cosas se han hecho bien es un deber recorrer y defender a la institución», afirma la edil, quien añade que «el alcalde no debe tomar decisiones precipitadas».
Desde ECP, Jordi Collado lamenta que la propuesta del ejecutivo «puede poner en riesgo al Ayuntamiento». Por ello, la formación progresista era partidaria de «solicitar una aclaración al tribunal» para definir si debe adjudicarse a la segunda o abrir un nuevo proceso. Pese a ello, será la primera de estas opciones la que se debatirá el próximo viernes en el pleno, con la mayoría PSC, Junts y los ex de Vox prácticamente garantizada si no hay sorpresas de última hora.