Monas a domicilio: la solución para salvar tradición y negocio

Las pastelerías buscan cómo sobrevivir al coronavirus. El reparto de monas a las casas de los ahijados es la única opción para poder salvar la campaña y amortizar parte de las inversiones

31 marzo 2020 10:42 | Actualizado a 06 abril 2020 11:20
Se lee en minutos
Para guardar el artículo tienes que navegar logueado/a. Puedes iniciar sesión en este enlace.
Comparte en:

Los pasteleros de la provincia de Tarragona han visto cómo la campaña de las monas de Pascua se ha ido al garete por culpa del confinamiento sanitario provocado por el coronavirus. La campaña de Semana Santa es, posiblemente, el sustento de muchos negocios durante todo el año. Pero este 2020 la imposibilidad de comerse este postre fuera de casa reduce drásticamente las ventas y con ellas la esperanza de superviviencia de las pastelerías.

Ante esta situación, algunas pastelerías se han puesto las pilas ideando la fórmula de mantener la tradición de la mona y a su vez rentabilizar la inversión en materia prima que han efectuado: chocolates, repostería varia y decoración.
En Tarragona, la pastelería Velvet MGL; en Reus, la Pastisseria Llauradó, en Riudoms, el Forn Domingo; o en Calafell la Pastisseria Rossanna (por citar algunos ejemplos) han decidido activar las monas a domicilio con el fin de poder mantener la tradición del Lunes de Pascua y también poder dar salida a las materias primas que se utilizan para elaborar las monas.

Marc Garcia, de la pastelería Velvet MGL, explica que «el chocolatero había visto el método que utilizaban las empresas de pizzería para poder llevar el producto. Así salió la idea de hacer monas por encargo y llevarlas al domicilio».
La pastelería se ha dedicado básicamente a las figuras de chocolate, que el comprador puede visionar en la web y redes sociales de la empresa y escoger. «Allí hay tamaños, precios.... la información que necesitan», explica Marc Garcia.

Velvet MGL abarca la ciudad de Tarragona y ya ha entregado algunos pedidos, aunque espera que los encargos se vayan prolongando hasta el Domingo de Resurrección.

Pagar hasta con bizum

En Riudoms, Carles Domingo también está buscando la mejor manera de vender monas. A diferencia de la pastelería de Tarragona, el pastelero riudomense no se pone límites y asegura que si hay clientes de cualquier municipio de la provincia, intentará hacer llegar este postre.

Carles Domingo ya ha empezado a trabajar las figuras de chocolate y comienza a recibir los primeros encargos. Para facilitar el pago, él ofrece tres alternativas: transferencia (lo más habitual para garantizar el cobro del encargo), con tarjeta «y llevaría un datáfono para ello», explica, o el bizum, una aplicación de móvil muy extendida para facilitar transferencias pequeñas.

Grupo de whatsapp

En Calafell, Marcos Díaz, de la Pastisseria Rossanna, ya había comenzado a moldear las monas de chocolate.  Desde que comenzó el confinamiento es uno de los comercios que puede seguir abierto. Pero también ha impulsado el reparto a domicilio. Los clientes le llaman y Marcos, por whatsapp, les envía un pequeño vídeo de los productos que tiene. «Así ellos escogen y se lo llevamos».

Los artesanos publicitan sus productos por las redes sociales para que el cliente pueda escoger

Díaz considera que con ese reparto a domicilio se van a poder disfrutar muchas monas. «Porque además en momentos de dificultad, el dulce ayuda. Anima». El negocio se unió al grupo de Instagram mesmonesquemai que han formado pastelereos para facilitar llevar las monas a domicilio. La aplicación geolocaliza las pastelerías para que el cliente pueda hacer el encargo a la más cercana a su domicilio.

«Es lo que podemos hacer para ayudar a pasar el confinamiento en casa». Marcos Díaz señala que los panaderos y pasteleros no van a dejar de trabajar «y en la celebración de la mona, quien quiera la va a tener», concluye

Comentarios
Multimedia Diari