El Drac visto como la figura de la leyenda de Sant Jordi, pero también como el personaje que juega con las niñas y niños de la célebre canción ‘Puff era un drac màgic’, del grupo Peter, Paul and Mary que ha sido versionada en multitud de ocasiones y que no puede faltar en cualquier cancionero popular. En base a esas dos vertientes se articula el nuevo capgros que ayer domingo se bendijo en el marco de las fiestas de barrio de Associació Veïnal Verge del Carme de Tarragona.
A causa de la última escalada de la pandemia, la entidad vecinal optó por anular los actos de la procesión prevista para el mediodía de domingo y concentró algunos de los encuentros más estacados en el interior de la parroquia de Santa Clara, que acogió la presentación oficial de la nueva figura del folklore de la ciudad y recogió las palabras de la encargada de apadrinarlo, la abogada tarraconense Maria Mercè Martorell, quien ostentó el cargo de concejal, dentro del grupo municipal del Partido Popular y como independiente, en el consistorio de la ciudad y fue la responsable de trabajar la candidatura de Tarragona como patrimonio de la UNESCO, un hito que se consiguió el 30 de noviembre del 2020. Además, Martorell destacó siempre por su papel próximo con las entidades locales, una faceta que la entidad vecinal quiso reconocerle ayer. «La llegenda de Sant Jordi es un relato que tenemos muy presente y valoro mucho el hecho de fusionarlo con la canción popular que os habla de un dragón que se transforma para jugar con los niños», destacó Martorell en su discurso a los vecinos de la zona, entre los cuales se encontraba el responsable de impulsar esta figura, el músico y presidente de l’Ateneu de Tarragona, Jordi Català.
«Creemos que era importante poner de relieve la figura de Martorell, puesto que ha sido una de las figuras políticas que durante muchos años se esforzó con éxito para promover la ciudad», explicaba este domingo el presidente en funciones de l’Associació Veïnal Verge del Carme de Tarragona, Josep Maria Ferran, al mismo tiempo que detallaba que los actos de celebración de este domingo, así como los de todo el fin de semana, se han adaptado para seguir las medidas de seguridad que imponen las cifras al alza de la pandemia de los últimos días.
«Los vecinos tenían muchas ganas de celebrar las fiestas, por lo que hemos adaptado aquellos actos que se podían celebrar con medidas de seguridad», explicaba Ferran. Los actos del domingo se centraron en la bendición de la abanderada Maria Mercè Martorell, el vermut popular posterior con distancia de seguridad y el concierto de habaneras de la tarde. Con este acto se cerraban tres días de fiestas, que este año coinciden con el 35 aniversario de la entidad, que agrupa a más de 5.000 tarraconenses.