La Guàrdia Urbana de Tarragona ha puesto en circulación dos nuevos coches y dos motocicletas con la entrada de año, que suponen una incorporación, según asegura el Ayuntamiento en una nota, muy necesaria para el cuerpo y que responden tanto a las necesidades diarias como acciones puntuales.
Los coches están destinados a la Unidad de seguridad ciudadana y las motocicletas servirán a la Unidad de Medio ambiente para controlar la anilla verde, el bosque de la Marquesa y zonas de difícil acceso. También serán útiles para el servicio de playas, los meses de verano. Próximamente se incorporará un tercer vehículo, que servirá para actuar de paisano en acciones que así lo requieran.
La concejala de Seguridad Ciudadana, Cristina Guzmán, apunta que esta incorporación de nuevos vehículos “forma parte del plan de renovación del parque móvil de la Guardia Urbana que pretende incorporar un mínimo de dos vehículos cada año”.