Hacienda bate su récord de recaudación en 14 años en Tarragona

Una inflación del 11% en la provincia sitúa en máximos desde 2008 lo que paga el contribuyente por impuestos como el IVA o el IRPF. También influye el turismo en auge y la creación de empleo

07 agosto 2022 20:36 | Actualizado a 08 agosto 2022 07:00
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Todos los ciudadanos le estamos pagando más a Hacienda por la inflación. Tanto es así que la recaudación de impuestos pulveriza récords en Tarragona, con cuantías que superan los niveles prepandemia e incluso van más allá. En lo que va de año, el Estado ha recaudado un 24,1% más de tributos en la provincia, la mayor cifra de los últimos 14 años. Hay que regresar a 2008, antes del estallido de la burbuja inmobiliaria y la posterior crisis, para ver un balance superior.

En el primer semestre de 2022, Tarragona ha pagado casi 956 millones, teniendo en cuenta los ingresos netos. Son 186 más que en el mismo periodo de 2021, en el que la cifra (770) ya suponía un aumento claro respecto a ejercicios anteriores, según los informes de recaudación mensuales de la Agencia Tributaria.

Dado que muchos impuestos, y especialmente el IVA, están vinculados al precio de las cosas, la recaudación de la Agencia Tributaria se ha disparado no solo por la mayor actividad económica, sino también y sobre todo por el mayor importe de las transacciones gravadas.

Impacto en el consumo

El impacto en el IVA es una consecuencia directa, pura matemática y estadística. «Si tú incrementas la base imponible, al estar aplicando un porcentaje, la cuota tributaria es mayor. Es el funcionamiento básico de un impuesto ‘ad valorem’», explica Juan Gallardo, economista y jefe del gabinete de estudios en la Confederació Empresarial de la Província de Tarragona (Cepta).

Los expertos alertan de que se trata de una subida encubierta de los impuestos, con una deriva doblemente penosa para el ciudadano, que no solo paga más caro todo sino que también está abonando más al fisco. Es muy difícil, por no decir imposible, escapar de esa espiral. «El que recauda impuestos no ha hecho ningún esfuerzo para cobrar más, sino que simplemente aplica el porcentaje sobre una cantidad mayor», aclara el economista tarraconense Rafael Muñoz, que agrega: «Son impuestos indirectos llamados regresivos, porque no afectan, como los progresivos, al que más tiene, sino a todo el mundo, al consumo, incluyendo el que menos tiene».

Muñoz recuerda que «es una dinámica que se percibe claramente en los hidrocarburos, que han ido aumentando de precio y se ve en el IVA, que es el índice que va a utilizar el gobierno para recaudar, de una forma general e inmediata». Los últimos datos de recaudación de la Agencia Tributaria así lo reflejan. En el primer semestre de 2022, en Tarragona se recabaron 442 millones de euros por IVA, casi un 13% más que en 2021 (392). Es la mayor cifra desde 2007 y 2008. Por supuesto, supera con creces los balances de 2020, lógicamente hundidos por la pandemia.

El Gobierno admite ya que la alta inflación que viene registrando España desde el pasado verano, intensificada por la crisis energética agravada por la guerra de Ucrania, y que está lastrando el poder adquisitivo, tiene un «impacto positivo» en los datos de ingresos tributarios.

Así lo ha reconocido el director general de la Agencia Tributaria, Jesús Gascón, durante su comparecencia ante la Comisión de Hacienda en el Congreso, que aunque limitó el efecto positivo de la inflación en la recaudación tributaria al señalar que no fue demasiado alto, sí admitió que el organismo empezó a registrar «cierto impacto positivo» de los altos precios en la recaudación desde el informe del mes de octubre de 2021.

Un semestre sin frenos

No hay que obviar en esta ecuación la importancia de que la actividad económica se haya recuperado, empezando por el turismo como dinamizador. Eso sí, hay que tener en cuenta que 2019 ya fue un año de absoluto récord turístico y las cifras recaudatorias –tanto del IVA como en general– eran inferiores a las actuales, determinadas por una inflación que en Tarragona llegó en julio al 11%.

La otra lectura de estos registros inéditos en más de una década es que el consumo, al menos en el periodo analizado de estos primeros seis meses del año, no se ha resentido.

Las ganas de volver a salir y viajar, superado lo más duro de la pandemia, han vencido a la escalada imparable de precios. Así mismo lo ha reconocido el sector turístico de la Costa Daurada, que se ha mostrado más preocupado por el repliegue del gasto a partir de la segunda mitad del año y en 2023 que ahora. La fórmula es sencilla: a más consumo, más recaudación por IVA, el principal impuesto de Hacienda, ya que un 46% de lo recaudado en lo que va de curso procede de ese tributo.

Otra figura impositiva clave es el IRPF, también en crecimiento. Se recaudaron 302 millones en la provincia, un 21% más que el año pasado. También es la mayor cifra desde 2008. Aquí influyen dos factores. Por un lado, el buen ritmo del mercado laboral y el aumento de los ocupados, ya que buena parte de estos ingresos proceden de las retenciones que se efectúan sobre las nóminas. Por el otro, vuelve a aparecer el IPC y su afectación sobre las pensiones, que también pagan IRPF.

Más para las arcas públicas

En suma, la inflación acaba teniendo un impacto sobre la renta. Javier Pérez, asesor fiscal y laboral y gerente de la asesoría Pérez Tarracogest, admitía al inicio de la campaña: «Hablamos de que habrá una subida encubierta de impuestos por el efecto de la inflación y el contribuyente acabará pagando más por culpa del IPC».

La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) calcula que aproximadamente cada punto de inflación adicional supone algo más de 2.000 millones de recaudación extra para las arcas públicas.

Mientras el IPC siga con su escalada, la recaudación irá al alza aunque puede frenarse si se da una retracción del consumo. En el cómputo global de todo 2021 la recaudación tributaria en Tarragona ya subió un 11,9% respecto a 2020 y un 5,6% frente a 2019, un año no condicionado por la pandemia. Son proporciones, sin embargo, que quedan desfasadas, ya que por entonces, en 2021, la inflación crecía en torno al 6 y al 7% y ahora supera los dos dígitos.

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