Grupo Griñó ha querido salir al paso de las supuestas acusaciones de la firma con el traslado ilegal de residuos de Italia a Tarragona. El grupo explica que «en respuesta a las informaciones publicadas recientemente relativas a una investigación de la Guardia Civil sobre presuntas irregularidades en el traslado transfronterizo de residuos desde Italia, Grupo Griñó «rechaza categóricamente las acusaciones y defiende la legalidad de sus actividades».
La compañía ha negado de forma rotunda las acusaciones vertidas sobre sus empleados y sociedades, calificándolas de infundadas. Según señala en su comunicado, las valoraciones contenidas en el atestado policial no se sustentan en pruebas concluyentes, y los hechos denunciados no reflejan la realidad de sus operaciones.
Grupo Griñó asegura que ha colaborado y continuará colaborando plenamente con las autoridades para aclarar los hechos investigados. Las acusaciones se centran en el traslado de residuos transfronterizos, que representa menos del 2,5% del volumen total de negocio del Grupo. En este sentido, la empresa destaca que el traslado internacional de residuos es una práctica legal, regulada y habitual en el sector.
En Catalunya, se importan anualmente más de 2 millones de toneladas de residuos a través de unas 38 empresas autorizadas. De esta cantidad, las operaciones del Grupo Griñó suponen unas 40.000 toneladas al año, todas gestionadas con los permisos y autorizaciones correspondientes emitidos por las Administraciones Públicas.
La compañía subraya que los residuos procedentes de Italia no son tóxicos ni peligrosos para la salud o el medio ambiente. De acuerdo con la Agència de Residus de Catalunya (ARC), las instalaciones del Grupo han superado numerosas inspecciones en los últimos años sin que se hayan detectado irregularidades.
En concreto, la planta de tratamiento de Constantí ha recibido 9 inspecciones en los últimos 4 años, mientras que en el depósito controlado de Riba-roja se han realizado 46 inspecciones en el mismo periodo, todas en coordinación con las fuerzas de seguridad.
Defensa de su reputación
Grupo Griñó lamenta el impacto reputacional que estas acusaciones han generado en la empresa y reitera su confianza en que la Justicia demostrará la legalidad de todas sus actividades. Por respeto al proceso judicial en curso, la compañía ha anunciado que no realizará más declaraciones sobre el asunto.
Un grupo con casi un siglo de trayectoria
Fundado en 1933, Grupo Griñó es una empresa familiar que, durante tres generaciones, se ha especializado en la gestión de residuos y servicios medioambientales. Con más de 90 años de experiencia, el conglomerado se ha destacado por su compromiso con la sostenibilidad, la innovación y el respeto al medio ambiente. Su actividad económica genera empleo directo para más de 1.100 familias y otras 500 de manera indirecta.