La iglesia de Nuestra Señora del Carmen, en el número 11 de la calle Assalt de Tarragona, acoge este sábado un concierto benéfico para el proyecto ‘Ningún niño sin regalo’. El recital irá a cargo del violinista ucraniano Danylo Vasýlchenko, un músico habitual en las plazas y calles de Tarragona o Reus, y también del coro de la iglesia del Carmen. Asimismo, tomarán parte niños de la Asociación de Residentes Latinoamericanos en Tarragona (Arlet), la entidad que organiza el evento. La actuación se iniciará a las 20.00 horas. La entrada consiste en un donativo de tres euros.
Este evento supondrá el pistoletazo de salida a la campaña que impulsa cada año Arlet de recogida de juguetes. A partir de este mismo sábado, se iniciará la recepción de juguetes, pero también de productos como ropa y alimentos, que se entregarán el próximo 6 de enero, por parte de Sus Majestades los Reyes Magos de Oriente. Arlet realiza un llamamiento a toda la ciudadanía. Las entregas de juguetes se pueden hacer a partir del 16 de diciembre, de lunes a sábado de 11 a 12 horas y de 17 a 18 h., en el 11 de la calle Assalt, el portal al lado de la iglesia.
Es la primera vez que la asociación de latinoamericanos organiza el concierto mientras que la recogida de juguetes se ha convertido en un acto tradicional por estas fechas navideñas. «Hacemos un llamamiento no solo a latinoamericanos o a extranjeros, sino a toda la ciudadanía de Tarragona, para que muestre su solidaridad», explica Luzmila Sejas, presidenta de Arlet. Los destinatarios del material serán familias necesitadas de Tarragona. «Hay personas y familias sin recursos que lo están pasando mal, ya que la situación económica es dura. Por eso intentamos echar una mano y ayudar en todo lo posible. Damos las gracias por la ayuda que nos ha dado la Iglesia del Carmen desde que empezamos con la asociación», comenta Sejas.
La asociación Arlet nació en noviembre de 2007. Durante este tiempo se ha dedicado a acompañar y guiar a buena parte de la inmigración que ha recalado aquí. De hecho, este evento de beneficencia por Reyes se ha convertido en un clásico de la Navidad que se ha ido realizando cada año, con la excepción de los momentos más duros de la pandemia. Esta es la actividad más grande que lleva a cabo la entidad.