El Ayuntamiento de Tarragona y la Generalitat de Catalunya han alcanzado un acuerdo para la cesión del Fòrum de la Colònia, de forma que la administración local pasará a ser la titular de la gestión del espacio hasta el año 2071. Ambas administraciones firmarán una concesión demaniaal que permitirá que, de manera gratuita, la corporación municipal asuma la titularidad de este yacimiento ubicado en la calle Lleida, que forma parte del conjunto monumental Patrimonio de la Humanidad.
Los detalles del acuerdo se darán a conocer en la reunión de la Comissió de Patrimoni que se celebrará el próximo jueves y, posteriormente, este deberá ratificarlo el pleno. Si todo se mantiene según el calendario previsto, se incluirá en el orden del día de la última sesión ordinaria de este año, que se ha fijado para el viernes día 18 de diciembre. A partir de ahí, se iniciarán los trámites para que ambas partes formalicen esta cesión, de forma que «en el primer trimestre del año que viene» esta podría ser una realidad, según estima el concejal de Patrimoni del Ayuntamiento de Tarragona, Hermán Pinedo.
Pinedo aseguraba que uno de los aspectos que ha dilatado este periodo de negociaciones fue que, en un primer momento, la Generalitat quería que la concesión fuera a treinta años. «Es una opción que a nosotros no nos valía, porque nos impedía recibir la subvención del ministerio», argumenta. Y es que, en paralelo a las conversaciones con la Generalitat, el Consistorio ya ha presentado un proyecto para la solicitud de una subvención correspondiente al 1,5% Cultural, del Ministerio de Fomento.
La ayuda asciende a 450.000 euros y esta inyección económica se complementaría con una aportación desde las arcas municipales de 80.000 euros. Esto debe permitir la recuperación de este yacimiento para que se convierta en una zona verde accesible y abierta al público. «La idea es que sea un parque como el de la Quinta de Sant Rafael, que está abierto durante el día y por la noche se cierra, por cuestiones de seguridad», indicaba Pinedo.
La parte más importante de la intervención corresponde a la mejora de la accesibilidad del espacio. En este sentido, quiere buscarse una solución para las escaleras desde la calle Lleida además de sustituir el paso elevado próximo a la calle Cardenal Cervantes. También está previsto que se incorporen bancos, se renueve la iluminación y se mejore la vegetación, para que se convierta en un espacio más agradable de cara a los vecinos y la ciudadanía.
Pinedo explica que «hemos pedido la subvención para hacer el proyecto completo». No obstante, el Ejecutivo formado por ERC y En Comú Podem asegura que si Madrid no concede los fondos, la inversión seguirá adelante, «aunque tendrá que hacerse por fases».
El Consistorio defiende que la revalorización de este espacio se enmarca dentro del proyecto de la Illa Corsini, que apuesta por la peatonalización de todo este entorno junto al Mercat Central y la Plaça Corsini. «Queremos que sea un espacio verde y sostenible de la ciudad y que nos permita poner en valor el patrimonio histórico que tenemos», manifiesta Pinedo.
El acuerdo se ha alcanzado la misma semana que el Ayuntamiento presentó el proyecto de peatonalización de la calle Canyelles. La obra consistirá en la habilitación de una única plataforma para viandantes, así como también se eliminará el cableado y se plantará nueva vegetación, además de bancos. Su ejecución, que se prolongará por espacio de cuatro meses, representa una inversión de 500.000 euros, y está previsto para el año que viene.