La Guardia Civil ha difundido esta semana la detención en Segur de Calafell de los dos máximos responsables de la banda de narcos Los Tiguerones, una organización considerada terrorista por las autoridades de Ecuador.
La operación se llevó a cabo junto a agentes de policía del país suramericano, y permitió la localización de los dos narcoterroristas, que se escondían en España con documentación falsa para ocultarse de la acción de la justicia.
Las últimas horas de una laboriosa investigación tuvieron momentos de tensión y sangre fría por parte de los integrantes de los dos cuerpos de seguridad. La Unidad Especial de Intervención de la Guardia Civil irrumpió en el chalet de los dos hermanos, apodados Comandante Willy y Ronco, para arrestarlos. Dentro había otras cuatro personas, dos de ellas eran la pareja y la hija del líder de este cártel ecuatoriano.
«En la casa había seis personas, los dos guardaespaldas, los dos sospechosos, una mujer y una niña. El Comandante Willy usó como rehén a la menor y se parapetó detrás de ella para evitar su detención», explican fuentes policiales al portal digital El Español.
El jefe de Los Tiguerones vendió caro su arresto en este chalet de una urbanización de Segur de Calafell (Baix Penedès): «La Unidad Especial de Intervención tuvo que disparar al cabecilla con munición no letal para reducirlo», añaden las mismas fuentes al medio digital.
El operativo evitó heridos y capturó a los dos narcoterroristas. El Comandante Willy era el líder y su hermano, además de su mano derecha, era el jefe de los sicarios. En Ecuador responderán ante la Justicia por sus múltiples delitos: asalto a TC Televisión, asesinato a un fiscal, robos, extorsiones...
El Servicio de Información de la Guardia Civil mantiene abierta la investigación para aclarar si Los Tiguerones habían iniciado alguna estructura operativa en España. Los dos líderes huyeron de su país y aterrizaron en España con documentación falsa: se hicieron pasar por colombianos, una nacionalidad más fácil para lograr un visado de turismo.
La búsqueda de los dos terroristas dio la pista definitiva en los últimos meses y su ubicación en Tarragona. Una vida de lujo fue uno de sus errores. El seguimiento policial y la investigación.