El 51% de los menores españoles de hasta 15 años es sedentario, con una media de más de tres horas diarias de inactividad, y entre ellos los chicos son más sedentarios que las chicas, un 53,6% por un 48,5%.
Estas cifras se recogen en la segunda ola de la Encuesta de Salud (ESFEC) realizada por la Fundación Española del Corazón (FEC), en colaboración con Sigma Dos, y se dan a conocer con motivo de la conmemoración este lunes, 14 de marzo, del Día Europeo para la Prevención del Riesgo Cardiovascular.
En el grupo de edad de entre 10 y 15 años el sedentarismo alcanza el 66,5%, mientras que desciende al 39,8% entre los menores de 10. En cuanto a la clase social, los niños de clase alta son más sedentarios (53,3%) que los de clase media (49%) y los de entornos más vulnerables (50%), señala la encuesta.
Uno de cada tres menores pasa entre semana más de dos horas diarias pegado a las pantallas, mientras que en el fin de semana son 3 de cada 4, especialmente los menores de entre 10 y 15 años, según este sondeo efectuado con 410 entrevistas, que garantizan un error de muestreo inferior al 5%.
Ninguna actividad
Un 29,3% de los chicos y chicas de hasta 15 años no participa en ninguna actividad de deporte escolar o extraescolar, pese a que la actividad física está incluida en esas etapas del currículum educativo. Entre los 10 y 15 años son el 33,6% los que refieren que no participan en actividad deportiva alguna.
En su tiempo libre, el 41,1% de los niños y adolescentes españoles pasa menos de una hora al día entre semana "jugando activamente" (corriendo, saltando...) en la calle o en interiores. Los fines de semana es el 25,2% el que acusa esa inactividad. Estos datos, combinados con otros relativos a la alimentación, la salud o el sueño, revelan que el 35% de los menores de 1 a 15 años tiene dos o más factores de riesgo cardiovascular, porcentaje que asciende al 40,7% en los menores de entornos sociales más desfavorecidos.
Respecto a los hábitos alimentarios, la encuesta desvela que apenas el 6,9% de los menores encuestados presenta una alta adherencia a la dieta mediterránea y que el 39,1% "sigue una dieta de muy baja calidad". Andrés Íñiguez Romo, presidente de la FEC, ha concluido que "los niños españoles tienen malos hábitos de salud cardiovascular".
"Si atendemos a los factores de riesgo cardiovascular cuando ya han aparecido, llegamos tarde. Por eso, debemos apostar por la promoción de la salud cardiovascular en todas las etapas de la vida, especialmente en la infancia y la adolescencia", añadió.