Redessa ha formulado ya la propuesta de adjudicación para la explotación del restaurante del Gaudí Centre, que salió a concurso en noviembre tras prácticamente tres años sin actividad en el local. Al proceso concurrieron un total de cuatro aspirantes. La oferta ganadora ha resultado ser la que presentó Perimar 2004 SLU, nombre fiscal de Grupo Limonero, una empresa de Mont-roig del Camp propiedad de Víctor Rubio y que cuenta con varios establecimientos en Miami: Restaurante Limonero, Ginger Café, Fish Playa Cristal, Calma y el chiringuito Cosita Beach.
Pendiente de la formalización del contrato, Rubio explica al Diari que «se trata de que el local sea un lugar de encuentro, no solamente un restaurante» y recuerda que el espacio «tiene su punto fuerte en las vistas, en la ubicación en el Mercadal y en el edificio emblemático». El negocio se llamará Terrassa Gaudí y la intención es que pueda abrir hacia Semana Santa, si es que hay margen suficiente. La reapertura implicará una inversión en «cambios estéticos» en el establecimiento para darle otro aire.
Rubio apunta que la voluntad es que a Terrassa Gaudí «se pueda ir en cualquier momento del día y no necesariamente solo a comer o a cenar» y que «lo más importante es que cuando estés arriba te sientas cómodo». En cuanto a la carta, más allá de los requisitos que marcaba el concurso, «se quiere hacer bastante uso del producto de proximidad y de la tierra, y una apuesta por la cocina de vanguardia y de autor» sin dejar de lado «una relevante bodega de vinos». La idea es «que tenga un tique medio».
El salto a la capital del Baix Camp desde Mont-roig «es un proyecto que tengo desde hace años en la cabeza porque Reus es una ciudad que me gusta muchísimo y, al final, para mí es un colofón; uno de mis objetivos era tener un negocio de restauración allí porque su proyección es buenísima y su atractivo es total», añade el propietario de Grupo Limonero, que especifica que «fue por eso que nos presentamos al concurso, y más teniendo en cuenta que en Reus la ubicación del Gaudí Centre es inmejorable; los rooftops como ese, en las ciudades que lo tienen, son buscados».
De la valentía que implica poner en marcha un restaurante, y especialmente uno de esas características, en tiempos de pandemia, Rubio dice que «somos conscientes de la situación actual, pero también miramos hacia adelante y hay que confiar en que todo esto va a pasar en algún momento; tenemos la esperanza de que se acabará pronto».
Según se ha programado, primero abriría el restaurante como tal y la terraza inferior del Gaudí Centre, las mesas y las sillas en el Mercadal, se desplegarían ya de cara al próximo 2023 aunque «los plazos siempre pueden acortarse».
Cerrado desde 2019
El restaurante, que es de propiedad municipal y se sitúa en la azotea del Gaudí Centre, sirvió sus últimos menús el día de Reyes de 2019 y ha permanecido desde entonces cerrado. Esta ha sido la segunda licitación para recuperarlo, después de que la primera quedase desierta en 2020. El canon que propuso Redessa era de 2.000 euros al mes más IVA, pero estableció un periodo de carencia hasta julio. La duración del contrato es de 14 años, hasta el 31 de diciembre de 2035. Redessa ha invertido 40.000 euros para adecuar el espacio, que ocupa 225 metros cuadrados con una terraza de casi 130.
