Tiendas del centro de Reus se convierten en punto de recogida para diversificar

Tras llegar la Covid y el auge de los pedidos en línea, los comercios captan otro tipo de público que, quizá de otra manera, no acudiría a su establecimiento

03 agosto 2022 21:06 | Actualizado a 04 agosto 2022 07:00
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Varios negocios del centro de la ciudad empezaron a trabajar como punto de recogida de pedidos en línea al llegar la pandemia. La medida permite captar otro tipo de público que, quizá de otra manera, no acudiría al establecimiento. Los propietarios de diferentes comercios explican que, a causa del auge de pedidos virtuales en el confinamiento, vieron «útil» implementar el servicio de pick up –que es como se conoce en inglés el servicio que da la tienda que ejerce como punto de recogida y guarda el paquete hasta que el comprador acude a recogerlo–.

Los comercios distinguen la opción de ser pick up como «ventajosa» y con la que diversificar. La ciudadanía puede recoger un paquete, enviarlo o devolverlo en una tienda que ofrezca el servicio.

Yolanda Jiménez, al frente de la tienda de bolsos, maletines y artículos de viaje Actual, trabaja con dos compañías de mensajería: con una empezó después del confinamiento y con la otra hace año y medio. «En realidad, no hay una motivación económica principal, recibes una cantidad por paquete, pero vi que era una manera de darse a conocer y atraer a gente a la tienda, algo que podía generar movimiento en la tienda», explica.

La propietaria explica que la actividad comercial de su familia se remonta al 1997 en la ciudad, que ella pertenece a la tercera generación del sello familiar y aunque «ya somos conocidos en Reus», no está de más que por ser pick up haya «más gente que nos conozca y entre al establecimiento», afirma. Y es que hace algo más de 20 años que abrió la tienda por su cuenta en la calle del Vent.

Preguntada por la afluencia de personas que recoge pedidos, Jiménez reconoce que al principio fueron viniendo «bastantes personas», pero de un tiempo para acá, «hay menos». Aunque es «difícil» de contar, la comerciante expresa que «va a rachas» y depende de la compañía y el volumen de paquetería que lleve.

«Nosotros montamos la web de la tienda en pleno confinamiento y ahora la usamos como escaparate, para que la gente consulte nuestros artículos», resume Jiménez, quien reconoce que no tienen «el tiempo suficiente» para estar actualizando la página, «se necesita a alguien que se dedique», aporta.

Por otro lado, la tienda de lencería, corsetería y trajes de baño Minimum de Reus, colabora con una compañía de mensajería, desde hace cerca de dos años. El gerente del negocio, Jordi Figueras, expresa que ejercer como pick up «te garantiza que, como mínimo, entren; todo ayuda, saben que existes y qué vendes». Aunque el trato es breve, la persona acude al lugar, presenta el número del pedido, lo recoge y se marcha, «todo ayuda», reconoce.

Las sensaciones

Desde el Institut Superior de Comerç Retail, Komercium, expresan sobre el tema que la pandemia fue la «palanca» que propició que cada vez más comercios se convertieran en punto de recogida. Desde el centro formativo acotan, también, que es una tendencia a tener en cuenta en los municipios más pequeños en los que, tal vez, «haya menos servicios» y, por tanto, menos puntos de recogida.

«En las poblaciones más pequeñas es muy útil, puede no estés en casa durante todo el día y a la vuelta del trabajo, pases por la tienda a recoger un paquete», añade el equipo de Komercium, desde el que cuentan, además, que ser pick up puede verse como una «oportunidad». Por contrapartida, Komercium defiende que guardar paquetes puede ir más allá, puede abrir la puerta a una venta física futura. «El problema de las tiendas de proximidad, en numerosos casos, es que entra poca gente a comprar y nosotros, a través de la formación que ofrecemos los vemos, enseñamos a sacar partido de la atención cara a cara, la de toda la vida», manifiestan.

El instituto de comercio imparte formación por todo el territorio, tanto a empresas como a entidades. «Los temas de comercio digital tienen mucha salida y los asuntos clásicos, como el escaparatismo o los relacionados con los horarios y la organización, no fallan nunca», declaran.

La presidenta de La Unió de Botiguers, Meritxell Barberà, expresa por su parte que ha observado cierto «incremento» de tiendas del centro convertidas en puntos de recogida en los últimos años, algo que el presidente del área del Tomb de Reus, Jacint Pallejà, dice no notar. Dar el paso para convertirse en pick up, tercia Barberà, «puede aportar beneficios», aunque «de momento» no se lo han planteado como colectivo. «Quizá en un futuro cercano nos lo pensemos», indica. La representante comercial hace énfasis en que, con el Covid, «sucedieron muchas cosas» y aparte de comercios que apostaran por convertirse en punto de recogida, también lo hubo que crearon su página web.

La digitalización es un objetivo en el que trabaja La Unió de Botiguers. «Ha habido muchos establecimientos que se han puesto en serio y han creado una web, pero para actualizarla hace falta tiempo», señala la presidenta del colectivo de comerciantes.

Barberà recuerda que las tiendas que pertenecen a grupos de compra tienen «más ventajas», aunque como entidad, de cara a septiembre, piensan publicitar el programa del Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital, el Kit Digital de apoyo a la digitalización. «Por si alguien tiene una página web creada, pero necesita un apoyo económico que le pueda ayudar en diferentes proyectos de digitalización, como el comercio electrónico o la presencia en internet», concluye Barberà.

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