Ya es definitivo: la tarifa del agua subirá en Reus un 10%. Así ha quedado aprobado definitivamente en la sesión plenaria del Ayuntamiento de Reus, de este viernes, 19 de enero, con la modificación de la ordenanza número 24, reguladora de los servicios del suministro de agua potable, alcantarillado y otras tarifas de servicios vinculados. Un incremento que, a la vez, irá acompañado de la incorporación de una tarifa social para las personas más vulnerables que comportará una reducción del 50% del importe de la cuota fija y del precio del primer y segundo bloque de la cuota variable del agua y el alcantarillado.
«La actual situación de sequía que estamos sufriendo nos hace imperativo tomar medidas significativas para asegurar la sostenibilidad y disponibilidad de este recurso», ha expresado el concejal de Hisenda, Manel Muñoz, que ha recalcado que «los ajustes propuestos se basan en el principio de quien más gaste, más contribuya». Un enfoque que, defiende, «no solo promueve la responsabilidad del uso del agua, sino que también generará unos ingresos adicionales que son cruciales en este momento para proyectos de conservación y adaptación a la actual situación de sequía».
No obstante, Muñoz ha querido subrayar la «conciencia» de los efectos negativos que esta subida del 10% de la tarifa del agua puede tener para las familias vulnerables, por lo que «hemos propuesto la modificación del artículo 7bis, para poder adaptarlo a la normativa vigente actual con este nuevo concepto de la tarifa social».
Como ha explicado, se trata de una reducción del 50% que «se aplicaría de forma automática a partir de la fecha en la que la Agència Catalana de l’Aigua nos comunique el cumplimiento de las condiciones para acceder a esta tarifa social o a partir del momento en el que Serveis de Benestar Social municipal trasladen al ente gestor del agua el informe que acredite la situación de vulnerabilidad del abonado».
El pleno también ha desestimado alegaciones que se habían presentado por la subida del precio del agua. Muñoz ha defendido que «no es superior al incremento del coste de vida acumulado en el periodo 2021-2024»: «Son muy superiores los incrementos del IPC que los ajustes planteados», ha insistido.
El concejal también ha respondido a dos alegaciones que señalan que se «obvia el impacto de género». «Los expedientes de modificación de las ordenanzas fiscales no tienen que disponer de este informe de impacto de género», ha aclarado.
La modificación de la ordenanza relativa al suministro del agua ha salido adelante, pero con únicamente los 15 votos favorables del equipo de gobierno (PSC, ERC y AraReus), mientras que toda la oposición (12 concejales) se han mostrado contrarios. Desde la CUP, Mònica Pàmies ha considerado que «un incremento del 10% no está fomentando el ahorro de agua».
En una línea similar se ha expresado el concejal del Partit Popular Sebastià Domènech que, además, ha expuesto que más allá de la rebaja del 50% a los más vulnerables, «no se bonifica a quien haga un uso más responsable».
«Si se revisara la estructura de Aigües de Reus, seguro que se optimizaría y podría reducirse el coste del agua para la ciudadanía», ha esgrimido el portavoz del grupo municipal de Vox, Julio Pardo, mientras que Teresa Pallarès, desde Junts per Reus, ha insistido en la «subida de impuestos injusta e injustificada».
Por su lado, el concejal no adscrito José Ruiz ha recordado que «hay familias que no pueden pagar la factura al día» y ha pedido que, en estos casos, «no tengan que pagar un recargo».