Más de 4.000 personas se ha manifestado este lunes por la noche en las calles de Reus para protestar contra la violencia policial del 1-O y en apoyo a los más de 800 ciudadanos heridos. La gente ha empezado a concentrarse a las 20h en la plaza Prim. El momento más álgido ha sido cuando la multitudinaria comitiva ha llegado frente a la comisaría de la Policía Nacional. Allí les esperaban desde primeras horas de la tarde decenas de furgonas de la policía con los agentes en su interior.
De hecho, la imagen de la calle General Moragues cortada circuló rápidamente a través de las redes provocando la presencia de muchos curiosos. Antes de la llegada de la manifestación, se personaron tres unidades de los Mossos d’Esquadra para instalar vallas en todo el perímetro.
La comitiva ha llegado sobre las 9h luciendo enormes esteladas, pancartas contra la policía y con cánticos como Els carrers seran sempre nostres. Las proclamas contra la represión policial y la presencia de la Policía Nacinal en Reus han continuado durante unos 40 minutos. La principal ovación de la noche se la ha llevado un bombero cuando, vestido con el característico traje y casco de color rojo, ha hecho acto de presencia y se ha situado al frente de la protesta. Allí, y para evitar posibles incidentes, un grupo de manifestantes había realizado un cordón humano de seguridad. Els Segadors ha puesto punto y final a las protestas frente a la comisaría y la comitiva ha regresado al Mercadal para terminar la marcha sin incidentes de ningún tipo.
La concentració arriba davant la comissaria PN #Reus. Més d'un miler d persones protestant i cridant contra la brutalitat policial pic.twitter.com/HSS08IqzQc
— francesc gras (@frankiegras) 2 de octubre de 2017