El Rei Carnestoltes LVIII ha llegado a Reus para quedarse. Lo dejó bien claro anoche en uno de los espectáculos y lectura del pregón más fríos que se recuerdan de los últimos años.
El público que se reunió en la plaza del Mercadal merece un reconocimiento especial. Salir de casa a las nueve de la noche y con el termómetro marcando 3 grados tiene mucho mérito.
La noche empezó con la tradicional ceremonia de invocación del espíritu carnavalesco, a cargo de la Germandat dels Set Pecats Capitals.
Fueron los primeros en recordar que este año hace 40 que se recuperaron los carnavales en la ciudad, después de casi el mismo tiempo de prohibición por culpa de la dictadura franquista.
La entrada en la plaza de un coche ‘tuneado’, acompañado por la música sonando a tope, animó un poco al público que aguantaba el frío como podía.
El particular dj que descendió del vehículo, aunque pudiera parecerlo, no era el Rei CarnestoltesNo obstante, no dejó pasar la ocasión para lanzar algún que otro dardo contra la aplicación del artículo 155 de la Constitución, la ley mordaza o contra el concejal de Esports del Ayuntamiento de Reus, Jordi Cervera, a quien propuso que haga el pregón del Carnaval del próximo año disfrazado de negro.
Unos supuestos problemas técnicos acabaron con la intervención de este dj. Fue entonces cuando un grupo de ‘diables’ carnavaleros hicieron entrada en la plaza. Fueron los encargados de hacer su particular invocación del espíritu carnavalero.
Exactamente un personaje que, con más voluntad que otra cosa, intentó imitar al personaje del ex presidente del Barça, Josep Lluís Núñez, que en su día parodió e hizo popular Alfonso Arús en el programa televisivo Força Barça.
Llegados a este punto del espectáculo entró en escena el Rei Carnestoltes LVIII, acompañado de su séquito y de la Reina Pimpolla VII. Todos ellos encima del escenario, y a diferencia de los pregones de años anteriores, intercambiaron un diálogo en el que todos los participantes aprovecharon para criticar temas de actualidad de la ciudad.
La tala de los pinos de la plaza de Catalunya, a Ciudadanos, la apertura de nuevos Mercadonas en la ciudad, el cierre de comercios tradicionales...
Tocaron diferentes teclas, aunque sin profundizar demasiado. A excepción de la capitalidad cultural de Reus, que centró gran parte del pregón hasta que el Rei Carnestoltes LVIII pronunció las palabras esperadas: «Queda inaugurado el Carnaval de Reus 2018».
