Proteger nuestra economía, nuestros bienes e incluso nuestra propia vida se ha convertido en algo más importante con la llegada de la pandemia y las consecuencias que ésta ha dejado a su paso. Las necesidades de las personas han cambiado drásticamente, lo que ha provocado que la industria aseguradora se haga un hueco importante en el día a día de todas las familias.
En este sentido, aunque los seguros son productos invisibles que deseamos no utilizar, nos ayudan en cualquier circunstancia o momento de nuestra vida. Sin embargo, en España existe un desconocimiento sobre las ventajas que esta herramienta nos puede dar.
Según los datos recogidos por UNESPA (Unión Española de Entidades Aseguradoras y Reaseguradoras) en su informe anual, la actividad aseguradora representa alrededor de un 5,2% del PIB español, produciéndose el pasado año un 2,96% de daños personales y un 1,29% de daños por bienes. Esto debe cambiar y para eso debemos incluir los seguros dentro de nuestros gastos prioritarios.
En el mercado podemos encontrar una gran variedad de productos que las entidades aseguradoras nos ofrecerán para ayudarnos a mantener una seguridad no sólo en nuestra economía, sino también ante un posible endeudamiento. Es decir, se adaptan a todas nuestras necesidades gracias a la ayuda de expertos en este sector que nos aconsejarán para que seleccionemos aquello que más nos conviene.
Así, de forma genérica, los seguros dan cobertura a daños materiales (los llamados multirriesgo), personales (seguros de vida, accidentes, salud y decesos) y ahorro (seguros de vida ahorro y planes de pensiones). Todos ellos serán nuestro mejor aliado en los momentos más difíciles.
Un ejemplo reciente de esta protección son las consecuencias de la borrasca Filomena, ocurrida en enero de este año. Para tratar de solucionar los problemas que el temporal provocó a sus clientes, las aseguradoras pagaron un total de 230 millones de euros para arreglar los daños en inmuebles y vehículos.
Otro ejemplo es que, entre 1987 y 2019, el Consorcio de Compensación de Seguros respondió a 706.430 incidencias por inundación que acabarían alcanzando la cifra total de 6.059 millones. A esta cantidad se sumaron 603.678 expedientes relacionados con tempestades atípicas que provocaron 1.318 millones en daños materiales.
Estos ejemplos están reflejados en el Informe Estamos Seguros 2020 de la Unión Española de Entidades Aseguradoras y Reaseguradoras. Este documento resalta, además, la importancia del sector asegurador en el mercado laboral español. Concretamente, genera aproximadamente 160.000 puestos de trabajo anuales directos en España, de los cuales 50.000 son de las compañías de seguros. Además, cada uno de estos puestos de trabajo es estable incluso en momentos tan duros y difíciles como la propia pandemia. Por eso se trata de un trabajo bien remunerado, de hecho, se sitúa en el ranking como el octavo empleo mejor pagado en España.
LA PROPUESTAPor otro lado, los seguros no solo son importantes por factores laborales, sino también en temas sociales tales como la igualdad de oportunidades en el trabajo. Las mujeres actualmente ocupan el 52% de la plantilla global de este mercado, una tendencia que crecerá, ya que en 2020 supusieron el 57% de los nuevos contratos.Debemos incluir los seguros dentro de nuestros gastos prioritarios
Otro factor destacable de esta industria es que tiene la capacidad innata de encauzar los recursos que le encomiendan sus clientes, así como su propio patrimonio, hacia inversiones sostenibles y con un impacto social beneficioso. Las aseguradoras suelen contar con una política de inversión prudente para el crecimiento económico duradero y sostenible.
Por último, si no tenemos claras nuestras necesidades y cuáles son los productos que van a cubrirlas al completo, resultará fundamental acudir a un asesor certificado en el ámbito asegurador. De este modo, evitaremos sorpresas inesperadas a la hora de utilizar el servicio contratado y obtener así los resultados deseados.