La impactante y clarificadora viñeta de Napi del domingo, 7 de agosto en el Diari y La puntilla de Xavier Fernández José el pasado día 10, con su mensaje directo, oportuno, pedagógico y motivador hace que debamos plantearnos quiénes son y quiénes han sido los regidores del Ayuntamiento de Tarragona estos últimos treinta años.
El recordatorio de lo que fueron el preventorio de la Savinosa, la Ciudad Residencial, el Fortí de la Reina, la Tabacalera, el Parking Jaume I, Ca l’Ardiaca, Quinta Sant Rafael, Banc d’Espanya ... y actualmente su desaprovechamiento total o su infrautilización califican la categoría de los responsables de las diferentes administraciones. Y, ¡qué decir! del último escándalo, el del edificio del Teatro Metropol, que conozco muy bien, por haber vivido más de medio siglo parte de mi família en su cuarta planta.
Tarragona es una ciudad emblemática de muy larga y rica historia, ubicada en un lugar privilegiado del mediterráneo, capital de una de las zonas turísticas con más potencial y futuro, con un complejo industrial de singular relevancia y una universidad de referencia en determinades áreas. Además, Tarragona posee una clase profesional y empresarial especialmente preparada con amplia experiencia, en un mundo cada día más competitivo y globalizado. A ello le debemos unir una rica y variada sociedad civil con una clase dirigente solidaria al servicio del bien común. Nos encontramos con dos sectores, conocedores en profundidad de la grave y procupante situación que vive la ciudad y sus vecinos deberían reflexionar y tomar una valiente y decisión. Hoy, mejor que mañana. Hay que aunar esfuerzos. Superar personalismos. Marcarse objetivos prioritarios, y un calendario de actuación. La ciudad lo precisa con urgencia. Es la hora de la sociedad civil. Es ella la que debe dar un paso al frente. Sus directivos deben asumir, aunque sea por un plazo breve, sus responsabilidades. Debemos ser conscientes que nuestra clase política, mayoritariamente, ni está preparada, ni tiene experiencia, ni espíritu de servicio... Sus resultados son evidentes.
La sociedad civil en España está despertando, iniciando un camino no fácil de sumar voluntades, superar personalismos, fijar prioridades y asumir responsabilidades. Por primera vez en España se han organizado dos congresos nacionales de la sociedad civil. El primero tuvo lugar en el Real Casino de Madrid en febrero de 2020. El segundo, en el Ateneo Mercantil de Valencia, en 2021. Ambos han sido convocados por la Asociación Sociedad Civil Ahora, Socia, que nació en 2019 y de la que la Fundación Independiente fue una de las promotoras.
Finalizo estas líneas haciendo un llamamiento a la sociedad civil tarraconense y a los directivos del mundo professional y empresarial, para que aúnen esfuerzos al sevicio de los tarraconenses y su emblemática ciudad. Las próximas elecciones deben ser el objetivo para iniciar una nueva y prometedora Tarraco.