Lejos quedan aquellas diadas en las que el independentismo salía masivamente a la calle. Sigue ahí, pero enfadado, indignado, y quizás todavía más, desilusionado, descreído, desmotivado. A falta de ver el poder de convocatoria de las movilizaciones de hoy, la previsión es que las manifestaciones sean más reposadas, sin tanta carga emocional y con menos poder de convocatoria. Volvemos a los 11 de Setembre con un marcado tono institucional. De hecho, el cambio de color político al frente del Govern de la Generalitat ya apunta hacia esta dirección. El president Salvador Illa y el PSC no tienen nada que ver con los ideales políticos de ERC o Junts. Es otra cosa. No ha cambiado la campaña institucional ni el lema de ERC.
Las manifestaciones convocadas para hoy se enmarcan en un clima de desilusión y desmotivación dentro del independentismo
Illa apela a la unidad y a la nación catalana, sin independencias, como ha defendido siempre. Y así lo dejó claro anoche en su primer discurso institucional del 11 de Setembre. «[La Diada es] una jornada para afianzar nuestra voluntad de ser y convivir. Pero, sobre todo, la Diada nacional debe ser un momento para compartir y reencontrarnos. Porque la Diada nos pertenece a todos los catalanes y a todas las catalanas». La Delegació del Govern de la Generalitat en Tarragona hizo el lunes un discreto acto en Escala Dei. Un acto institucional sobrio, con música, parlamentos y en el que se reivindicó, también, el liderazgo de Catalunya sin reclamar que se rompa nada. Necesitamos pasar página. Mirar hacia adelante. Dejar atrás las batallas políticas, las acusaciones cruzadas y las utopías para potenciar un país como el nuestro que es referente en materia industrial, turística, agroalimentaria, de investigación, de sanidad. Tenemos que potenciar nuestros valores y crecer. Potenciar proyectos que muevan la economía y que pongan a Catalunya en boca de todos por su iniciativa, su potencial, su fuerza, su liderazgo y su capacidad de generar proyectos y dinamizar la economía. Necesitamos avanzar. Hoy será una Diada más. La viviremos sin grandes convocatorias masivas y alejados de la crispación.