Marc Bertran (Tarragona, 31 años) es el rostro de la bienvenida sevillana en la Eurocopa 2020 (pospuesta al 2021 por la pandemia de Covid-19). Este joven tarraconense es la primera persona del comité organizador de UEFA que se encuentran las Selecciones, autoridades e invitados a su llegada a Sevilla, una de las once sedes en las que se está disputando la competición continental. «Me encargo de gestionar la llegada y salida de los equipos a la ciudad, así como los invitados y autoridades», explica minutos después de despedir en el aeropuerto al mismísimo presidente de la UEFA, Aleksander Ceferin, presente en el España-Suecia del lunes por la noche.
Nada más poner un pie en el aeropuerto de la capital andaluza los componentes de las delegaciones de los equipos que participan se encuentran con Marc Bertran que les indica el camino hacia la flota de coches y autobuses oficiales de la organización y les acompaña hasta el hotel de concentración o el mismo estadio de La Cartuja. Un sistema bien entrenado durante dos meses en los que se ha cuidado al detalle el protocolo de llegadas y salidas de todos los participantes en esta Eurocopa. La mayoría de procedimientos vienen marcados por la UEFA y son calcados en todas las sedes como por ejemplo «las líneas de comunicación o el sistema informático para fijar los movimientos, mientras que evidentemente otros, como pueden ser los hoteles, los desplazamientos por la ciudad, el transporte, son específicos de cada sitio», explica Bertran. Y es en estas cuestiones más particulares en las que Bertran y todos sus compañeros de sede han tenido que aplicarse el doble. «El año pasado, antes de la suspensión de la Eurocopa estuvimos trabajando en Bilbao, que era la sede española para la competición. Allí volvimos a inicios de este 2021 con el objetivo de seguir con los preparativos. Sin embargo, en cuestión de semanas se cambió la sede. De Bilbao se pasó a Sevilla con lo que ello supone para la organización en cuestiones logísticas, de instalaciones, planos, circulaciones, etc.», explica. Un trabajo a contrarreloj facilitado, como destaca el tarraconense, por la predisposición de las autoridades sevillanas para que todo saliera bien.
El 11 de junio comenzó el torneo pero no fue hasta el 12 que llegó a Sevilla la primera selección, Suecia. El domingo lo haría España que regresaría a Madrid el mismo lunes de madrugada después del empate, sin goles, en su debut en la Eurocopa. Eran las 2 de la madrugada cuando la expedición de La Roja abandonaba Sevilla. «No se les veía muy contentos que digamos. Pero hay que tener calma, queda mucha Eurocopa», cuenta.
Tiempos de pandemia
Marc Bertran exdeportista de élite tiene un largo bagaje en la organización de eventos deportivos de gran calibre. En su currículum destaca su participación en el comité organizador de los Juegos Mediterráneos Tarragona 2018. El acontecimiento que más le tocó, por ser el de casa. Pero también ha desarrollado distintas funciones en el Mundial de Atletismo Júnior 2012, Mundial de Natación de Barcelona 2013, el Mundial de Atletismo de Londres 2017 y la Final de la Champions League 2017 en Cardiff. Todas ellas antes de que el Covid-19 golpease con fuerza a todo el planeta. Una pandemia que lo ha revuelto todo. Se ha pasado de gestionar miles de espectadores a estar pendientes de toda una serie de protocolos sanitarios para evitar los contagios. «El Covid-19 lo ha complicado todo. En primer lugar porque obliga a una operativa a la que no estábamos acostumbrados. En mi caso hay que tener en cuenta, por ejemplo, que las flotas de vehículos son más grandes. En cada coche solo pueden ir dos personas y en las furgonetas cuatro. Eso obliga a necesitar más espacio en el aeropuerto, en los hoteles y en el mismo estadio», cuenta Bertrán al tiempo que destaca la excelencia de los protocolos de la UEFA en este sentido: «Han funcionado. Todo está saliendo sobre lo previsto. Las cosas que no debían pasar son mínimas y poco relevantes, así que podemos estar contentos por cómo están yendo las cosas».
Sea desde el Centro de Operaciones de Transporte, próximo a La Cartuja, o desde el mismo aeropuerto, Marc Bertran está pendiente de que todos los participantes en la UEFA Eurocopa tengan el recibimiento y la despedida que merece la máxima competición continental.