Kiko Vallespí está viviendo una temporada atípica, pero su carácter luchador hace que supere las dificultades. Problemas mecánicos en su vehículo todo terreno impidieron que pudiera empezar a entrenar con normalidad el último trimestre del año 2018, y también le privaron de participar en competiciones sobre tierra. Después de estar dos meses parado, a mediados de diciembre, el musher tortosino empezó a prepararse para llegar en condiciones a las citas sobre nieve que tiene previsto cubrir este año 2019.
Él mismo explica que «nos hemos tenido que replantear la temporada, pero ahora ya está todo superado». El ebrense tomará parte esta semana en la Pyrénées Race que se celebrará en el Plató de Beille (Pirineo francés): «sin duda será un gran reto porque se trata de etapas de treinta kilómetros y nosotros vamos justos porque no hemos podido entrenar con normalidad. El reto será acabar en condiciones».
Posteriormente, Vallespí y su equipo se tomarán un respiro de una semana en el plano competitivo y volverán a la acción del 18 al 23 de febrero en la Snow Race, cita entre el Pla de Beret y Portainé: «está organizada por los antiguos organizadores de Pirena, que quieren recuperar su espíritu. Tiene seis etapas y combina días rápidos con jornadas alpinas. Ascenderemos al Pic de l’Orri, el más alto que subíamos en Pirena, carrera que corrí cinco años y que echo mucho de menos. Por todo ello, será especial y me hace ilusión». Según el tortosino, en esta competición le gustaría «luchar por el podio y hacerlo lo mejor posible».
Luego, Vallespí afrontará el Campionat de Catalunya y el Campeonato de España con la idea de ocupar posiciones de privilegio en la clasificación general y dentro de este reto «estar lo más arriba que podamos».
Para que todo vaya como él espera, Vallespí y su equipo se preparan a conciencia cada día: «cuando empiezas a entrenar en septiembre puedes ir subiendo paulatinamente kilómetros a los perros, pero en las circunstancias en las que nos hemos encontrado, de una semana a otra casi nos ha tocado doblar kilómetros. Ha sido duro para los perros y para mi, pero confío en tener suerte».
Una vez más, competición y entrenamientos a parte, Vallespí cuenta con patrocinadores: Pinsos Acana, Agatameus Veterinaria de Deltebre y el Patronat de Turisme de la Diputació de Tarragona Terres de l’Ebre.
Gran experiencia
Vallespí lleva quince años compitiendo y apunta que «cuando te encuentras en el sitio donde se realiza la competición no lo cambiarías por nada. Vuelves a encontrarte con compañeros, entrenas y compites sobre nieve y ves cómo el equipo lo da todo. Además, mi padre seguirá acompañándome a las competiciones. Mientras tenga ilusión y pasión seguiré, pero también dependerá de la evolución de mis hijos Joan y Laia en el mundo del tenis, porque los dos compiten y entrenan conmigo por las tardes. Por ahora es compatible, pero si llega el momento en el que no lo son, la prioridad serán ellos».
