El derbi no arrancó como muchos se hubieran esperado. Jugadores terminando los calentamientos, las gradas repletas de aficionados de y un ambiente de derbi impagable. A la receta solamente le faltaba un ingrediente para poder saborearla de la mejor manera. Los árbitros.
La dupla arbitral marcó el inicio del partido. A pesar de que el encuentro estaba previsto para las 20.00 horas, en ese momento los colegiados no habían hecho acto de presencia. El problema era que se encontraban aún en Barcelona, donde habían arbitrado otro partido. La situación retrasó el pitido inicial hasta 40 minutos que llegaron a ser eternos.
Con todos los actores listos para empezar, el primer derbi tarraconense de la temporada en Superliga 2 dio el pistoletazo de salida.
Pese a que el resultado refleja un abultado 3-0, el CEVOL Torredembarra se quedó a las puertas de igualar el partido en el segundo set. Por su parte, el SPiSP demostró su pegada en los momentos más complicados de ese segundo acto y terminó dando un recital para redondear el 3-0 definitivo en su último encuentro en Salou.
El primer set arrancó frenético. Ambos conjuntos salieron enchufados sobre el parqué a pesar de la espera que les habían hecho sufrir. Solo con observar la manera en que celebraban los primeros puntos los dos equipos ya se podía vislumbrar las ganas de derbi que los dos equipos tenían.
La igualdad estuvo presente en los puntos iniciales, con un CEVOL que sorprendió plantando cara al SPiSP. Cuando los cooperativistas pusieron el turbo, los torrenses se vieron superados. Del 12-10 se pasó al 17-10 que empezaba a abrir una brecha difícil de cerrar.
Con el 21-13, Carles Mora miró a su técnico y pidió el tiempo muerto. El equipo necesitaba reactivarse para meterse en el partido y no entrar en una dinámica que podía dejar tocado a los suyos para el resto del choque. Dicho y hecho. Con los detalles de Mora como herramienta principal, los torrenses anotaron un parcial de 1-5 que maquillaba el marcador y dejaba buenas sensaciones para entrar a la segunda manga.
El cambio era evidente. Esa parada al final del primer set había permitido al CEVOL recuperar la confianza con la que habían iniciado el encuentro. El momento se trasladó también a la segunda manga y salieron en tromba ante un SPiSP que no terminaba de hallar la tecla adecuada. Bordas destrozó el conjunto rojillo con el 1-5 de presentación. El encuentro estaba más vivo que nunca y los torrenses no iban a tirar la toalla.
Un error en el saque de Noé de Mena despertó a los tarraconenses. Impulsados por los misiles de Belda en el servicio y un Ossola de dulce, devolvieron las tablas al luminoso (6-6).
La reacción del SPiSP no hizo retroceder ni un palmo al CEVOL. Contuvo el buen momento de los rojillos y gozaron de nuevo de cuatro puntos de ventaja (12-16). Los torrenses estaban por primera vez llevando la iniciativa del partido, pero el equipo de Stevovski les hizo bajar de la nube. Las diferencias se empequeñecieron hasta llegar con un igualado 19-19 a los puntos finales.
Con el set del empate a tocar para los visitantes, el SPiSP demostró de qué pasta está hecho y le arrebató el set con un definitivo 25-22. Los mejores momentos de los torrenses hasta el momento se habían quedado en eso, un casi set. Mientras, el combinado cooperativista había mostrado músculo en cada una de las jugadas. En los momentos clave, cuando el CEVOL se crecía y podían aparecer las dudas, los de Stevovski no dejaban indiferente a su afición.
Sin rival
El 2-0 fue demasiado para los visitantes. Prácticamente supuso el set de la victoria y permitió que los rojillos jugaran a placer en la última manga. Con el SPiSP en su versión rodillo gracias al subidón tras ganar ese set tan complicado, el partido terminó. El CEVOL no logró acercarse en el luminoso en ningún momento y el 25-13 selló un triunfo muy celebrado entre aficionados y jugadores tarraconenses.
Esta supone la cuarta derrota consecutiva para el CEVOL Torredembarra, que a partir de ahora empezará a tener rivales más asequibles. Por su parte, el CV SPiSP consigue quitarse el mal sabor de boca de la semana pasada en su duelo ante el San Roque gracias al triunfo en el derbi. El conjunto tarraconense sigue en la pugna por las primeras plazas del grupo C.