El CB Tarragona ya está en marcha. El equipo azulado inició la pretemporada con muchos cambios. Empezando por el banquillo. Noé Monroy será el encargado de coger el testigo de Berni Álvarez en el banquillo del Serrallo y guiar al cuadro tarraconense en su regreso a LEB Plata. Una vuelta a las categorías semiprofesionales cargada de «ilusión», como señaló el propio entrenador. Monroy sabe lo que es la categoría, estuvo en el cuerpo técnico en la última etapa del CBT en LEB Plata, y entiende que «la carga de trabajo y el volumen de entrenamientos y horas de dedicación aumenta con respecto a EBA, pero lo encaramos con ganas y encantados de comenzar», dijo.
El técnico no será la única cara reconocida, pero nueva. Dos jugadores bien conocidos por la afición del Serrallo participaron de la primera sesión de trabajo del equipo: Artur Alaminos y Ferran Torres. El primero regresa a casa después de varios años en el extranjero y de jugar las últimas temporadas con el CB Salou. La pasada en LEB Plata. Mientras que Ferran Torres, un mito en el pabellón tarraconense, buscará añadir experiencia y veteranía a la plantilla.
También entrenó con sus nuevos compañeros Baptiste Chazelas. El pívot francés es otro de los fichajes del equipo tarraconense para esta temporada.
De los nueve componentes confirmados de manera oficial, solo faltó el norteamericano Jacob Boonyasith, por motivos burocráticos. Se espera que pueda llegar en las próximas semanas para incorporarse a la dinámica del equipo.
No será el último en llegar. Noé Monroy admitió que falta un último refuerzo que acabe de perfilar la plantilla.
De momento, para poder completar el número de jugadores necesarios en los entrenamientos, el técnico del CBT contará con jugadores de la cantera como Miquel Femenia, Ander Garcia, Tomas Kohan y Miguel Ángel Pérez. Jugadores a los que Noé Monroy conoce bien, puesto que lleva varias temporadas dirigiendo al Sénior B. El entrenador de Puertollano asegura que no solo serán efectivos de cara a los entrenamientos, sino que tendrán presencia también en la temporada: «Tenemos la suerte de contar con chicos del filial, como lleva haciendo el club en las últimas temporadas. Los inicios son complicados porque viene gente de fuera y ayudan a poder entrenar. Pero la idea no es que no sea solo en pretemporada y que también ayuden durante la temporada oficial».
Uno de los jugadores más ilusionados con el retorno es Dani Tugores, uno de los capitanes de la plantilla. El balear se pasó la mayor parte de la pasada temporada lesionado y aunque participó, y de qué manera, en la fase de ascenso disputada en Llucmajor, necesita «compensar que he estado varios meses desconectado a nivel de pista». De ahí que sea de los que más concentrados está en aprovechar estas semanas para «ponerme al 100% y coger las rutinas de entrenamiento».
Las primeras sesiones son suaves pero costosas, por aquello de ponerse de nuevo al trabajo. Aunque hacerlo con el regreso a LEB Plata es más fácil.
El club tiene previsto disputar una serie de partidos. El primero ante el Mataró, rival de LEB Plata. La competición arrancará el 8 de octubre ante el Palma.
