Edu Oriol ha dicho adiós al fútbol. El futbolista de Cambrils se retira a los 37 años tras una carrera repleta de retos y aventura a la que ha decidido poner fin, aprovechando las fiestas navideñas. El lateral se encontraba sin equipo desde que abandonó la disciplina del Xerez allá por el mes de octubre. Han sido meses de agente libre en los que no ha llegado la oferta tentadora esperada para seguir jugando y eso ha provocado que haya decidido retirarse. Ahora su futuro está en los banquillos, ya que ayer ya fue presentado como nuevo técnico del Motril en Tercera RFEF, en el que será su primer reto como entrenador.
El cambrilense es el hermano gemelo del capitán del Nàstic, Joan Oriol. Ambos comenzaron juntos en el mundo del fútbol y llegaron a compartir vestuario, pero sus carreras acabarían tomando distintos caminos. Edu Oriol militó en las categorías inferiores de la Pobla de Mafumet. Allí alcanzó el primer equipo. Más allá del filial grana también jugó en el Reus Deportiu y en el Sant Andreu. Su buen año en el histórico conjunto catalán le abrió las puertas del filial del Barça en el que estuvo durante dos temporadas antes de dar el salto al Zaragoza, en el que llegó a disputar nada más y nada menos que 39 partidos en Primera División.
Tras dos años en La Romareda, Oriol decidió emprender una aventura lejos del fútbol español que le llevó a jugar en Azerbayán, de la mano del Khazar Lankaran, en Chipre, con el Limassol y en Inglaterra, en el Blackpool junto a su hermano, y en Rumanía, con el Rapid de Bucarest. Tras su experiencia en el extranjero, el cambrilense firmó por el Llagostera, regresando así a España.
Allí comenzaría una etapa por el fútbol nacional en la que pasado por diversos equipos antes de poner fin a su carrera. Tenerife, Ibiza, Atlético de Sanluqueño, Utrera, UCAM Murcia y Xerez han sido sus últimos equipos.
Oriol anunció su retirada mediante las redes sociales y dejó el siguiente mensaje de despedida: «Ha llegado el momento de decir adiós a lo que ha sido mi vida, mi pasión, el lujo de poder ser jugador profesional. He sido un privilegiado durante todos estos años pudiendo llegar a lo más alto y alcanzar la 1ª División en España. Poder jugar al lado, y en contra, de los mejores jugadores del planeta. Siempre podré decir que he jugado al lado de Messi y frente a Cristiano Ronaldo, dos jugadores que han marcado un antes y un después en este deporte. Y eso no me lo quita nadie».
En su mensaje también se acordaba de todos sus compañeros de aventura durante todos estos años: «Agradecer todos estos años el apoyo incondicional de los míos, en especial a mi familia y también aquellos que han ido apareciendo a lo largo de este bonito camino. Sin olvidarme de todos aquellos compañeros, trabajadores, cuerpos técnicos, directivas de los clubes que me han ayudado a crecer y a ser mejor persona, exprimiendo al máximo cada segundo de esta bonita profesión que tantos valores representa».
Por último, el cambrilense nombraba a las personas más especiales en su carrera: «Por último, me gustaría hacer mención a la gente de Cambrils, por el apoyo constante y el cariño recibido todos estos años. En especial a cuatro personas: Rufino, Joan Oriol,Ramon Llobet y Joan Pijuan».