Sobreponerse a una dinámica adversa es siempre positivo. Más aún si la caída y la mejoría se producen en el mismo partido, como le sucedió a Sant Pere i Sant Pau, que cosechó la segunda victoria de la temporada en la Superliga ante San Roque después de caer en el primer set, pero imponerse con claridad en las tres siguientes mangas, que no dieron opción a los visitantes.
Los canarios empezaban fuertes sobre el parqué, con una salida agresiva que se reflejaba en el luminoso (1-4). Los de Vlado Stevovski comenzaron el partido algo imprecisos, pero pronto entraron en él y empataron (4-4) liderados por Denys González, fichaje cooperativista de este curso.
El intercambio de golpes, sin embargo, no se quedaría ahí: los visitantes responderían con un nuevo parcial para volver a ponerse por delante, en este caso con un gran Mauro Fuentes.
El conjunto tarraconense consiguió contener la sangría, pero no pudo volver a igualar el marcador hasta el final de la primera manga (23-23). Hasta entonces, se mantuvo por detrás, a pesar de que Stevovski paró el partido en dos ocasiones para tratar de poner en problemas a los de Alberto Rodríguez.
Y lo hizo a partir del segundo tiempo muerto visitante, al que se llegó con 16-17 tras un parcial rojillo de tres a cero. El set tomó otro cariz y, con 20-23, un nuevo parcial empató el duelo. No obstante, cuando todo estaba por decidir, un punto de Fuentes y un error en el armado de González decantaron el primer asalto para San Roque.
La segunda manga tomó una dinámica parecida, con los canarios mandando en el marcador y los tarraconenses a remolque aunque sin perder la cara. Tras la mayoría del set por detrás y con los de Alberto Rodríguez gozando de la máxima ventaja (12-17), los de Vlado Stevovski se pusieron el mono de trabajo para remontar y situarse por delante con un parcial de siete a cero (19-17) y con un Denys González estelar, anotándose tres de los siete tantos. Después de la inmensa remontada y de tener el set a tiro (23-20), sendos puntos de Moisés Vázquez y de Gerard Osorio, también fichajes de este año, pusieron el uno a uno.
SPiSP empezó el tercer asalto tan fuerte como acabó el segundo (7-2), con un Osorio en ‘modo estrella’. San Roque recuperó algo de terreno (11-8), pero fue a remolque hasta el final y sucumbió el segundo punto ante una actuación coral cooperativista (25-18). SPiSP, en racha, se había recuperado del golpe inicial guerreando.
El cuarto set comenzaba con las espadas en todo lo alto y con una férrea igualdad. Así se mantuvo hasta que los rojillos la rompieron con dos puntos consecutivos (19-17) y se llevaron su tercer asalto y el partido (25-21), culminando así un ejercicio de resiliencia en un partido en el que los cooperativistas se levantaron y noquearon.