Era el duelo más complicado hasta la fecha en este Roland Garros y Carlos Alcaraz lo superó con nota. El español, de vuelta a la sesión de día en el torneo parisino, doblegó al italiano Lorenzo Musetti, uno de sus rivales contemporáneos, por 6-3, 6-2 y 6-2, y ya está en cuartos de final, donde se enfrentará al ganador del duelo entre Stefanos Tsitsipas y Sebastian Ofner. Con Novak Djokovic ya clasificado a semifinales -el serbio pudo en tres sets con Juan Pablo Varillas- las semifinales entre los dos grandes favoritos cada vez están más cerca.
Alcaraz, que venía de tres victorias más o menos encarriladas ante tenistas sin muchos argumentos para competirle de verdad un partido aquí, tenía este domingo enfrente a un Musetti al que conoce muy bien de su época de juvenil y que le derrotó en la final de Hamburgo el año pasado.
No era un regalo del cuadro Musetti, que este año ya ganó a Djokovic en arcilla, en Montecarlo, y así lo hizo mostrar en un inicio efervescente en el que en los dos primeros juegos rompió el saque del español y confirmó su servicio. Se ponía el partido cuesta arriba para Alcaraz, que ya había tenido alguna laguna contra Flavio Cobolli (tercer set), contra Taro Daniel (segundo set) y contra Denis Shapovalov (segundo set), pero siempre con ventaja en el marcador y ya rodado. Esta era la primera vez en este Roland Garros que era el rival el que salía a mandar.
Y esto a Alcaraz no le inmutó. Aceptó el mayor acierto de su rival y comenzó su partido. Atacó el revés del italiano, precioso a una mano, pero inconsistente, y llegó a cada dejada que le provocó. En muchas ocasiones pasado de revoluciones, Musetti lució una estética impecable, pero de poca pegada y competitividad a la hora de la verdad. En cuanto Alcaraz neutralizó la desventaja, el italiano desapareció. Se llevó un parcial de ocho a uno y afloró en él una desesperación que le hizo mandar una pelota fuera del estadio tras perder un punto. Estaba enfadado consigo mismo, por no poder plantar batalla, pero era incapaz de trasladar esa furia a su raqueta y sacar algo positivo de ella.
Nole vence también fácil Con dos sets ya perdidos y sin siquiera poder poner al público de su parte, era una quimera pensar en que Musetti se podía convertir en el primer tenista en remontar un 2-0 a Alcaraz en un Grand Slam. Algo le falta a este italiano de 21 años para soñar con esos logros, algo que sí que tiene Alcaraz, que no dejó de atacar la pelota y de buscar el golpe ganador hasta que el partido estuvo resuelto.
Con dos horas y ocho minutos, Alcaraz tuvo suficiente para despachar su test más complicado de la primera semana en Roland Garros y entrar en la recta final de torneo con todas las garantías posibles.
Djokovic, el otro gran favorito del cuadro masculino, tampoco tuvo ningún apuro para meterse en cuartos y venció a una de las sorpresas del torneo, Juan Pablo Varillas, por 6-3, 6-2 y 6-2. El peruano, que llegaba a este encuentro tras tres partidos seguidos a cinco sets, ya no pudo más y se inclinó ante un Djokovic que sumó sus cuartos de final número 17 en Roland Garros, uno más que Rafael Nadal. El serbio se medirá a Karen Khachanov, que remontó al italiano Lorenzo Sonego (1-6, 6-4, 7-6 (7) y 6-1).