La película L’espill del cineasta de L’Ampolla Mario Pons sigue su andadura en el sector cinematográfico, decidida a conquistar todos los públicos. Así, hoy se estrenará en la plataforma Filmin, un logro que, en palabras del director, «es una gran oportunidad para seguir mostrándonos al mundo, después de que el largometraje haya sido seleccionado en más de 20 festivales a nivel internacional y se haya estrenado en más de treinta poblaciones y catorce salas de cine, desde Catalunya hasta Valencia, pasando por Baleares y el sur de Francia». En esta misma línea, Mario Pons pone en valor que «Filmin es la plataforma de los cineastas por excelencia; sabemos que programa cine de autor, de calidad y europeo, y para mí es un orgullo entrar en el streaming por la puerta grande».
L’espill es una comedia romántica basada en el exilio de Hilaire Arasa, un ciudadano narbonés que regresa a su pueblo natal, Camarles (Baix Ebre). A través de la figura de Arasa, Pons revisa acontecimientos sociales y políticos, desde el exilio republicano hasta la celebración del referéndum de autodeterminación de 2017. La película de Mario Pons, producida por Sègula Films, cuenta con el apoyo de la Diputació de Tarragona, los ayuntamientos de L’Ampolla, Camarles y Tarragona, el Memorial Democràtic, el Institut pel desenvolupament de les Comarques de l’Ebre y la Diputació de Girona, además de la colaboración del Canal Terres de l’Ebre y TAC 12.
Así, echando la vista atrás, Mario Pons asegura que «no podía llegar a imaginarme que tuviese este recorrido, aunque queríamos que así fuese; mi objetivo, como activista del mundo cultural, siempre ha sido hacer llegar mis obras al máximo de público posible». En consecuencia, Mario Pons lamenta que «la Acadèmia del Cinema Català no haya seleccionado L’espill para optar a los Premis Gaudí, aun tratándose de una producción catalana y que habla de temas tan trascendentales». En cualquier caso, para el cineasta de L’Ampolla lo importante del séptimo arte es que «el cine sigue siendo una reunión, en una sala oscura, en la que los espectadores comparten sentimientos».