Ensayo gráfico: Cine, pintura y performatividad

La relación entre cine y pintura es fructífera. La pintura, como en otras ocasiones el teatro, ha servido de vehículo al cine para reflexionar sobre si mismo. En “La bella mentirosa”, el cuerpo del pintor Piccoli nos recuerda al de un autor como Picasso, de la misma manera que la presencia de la actriz Emmanuelle Béarta nos remite a la figura de la musa en la pintura. A partir de este hilo de la relación entre pintor y musa, entre aquel que observa y aquella que sostiene la mirada y pone el cuerpo, se elabora una de las relaciones que establece la exposición sobre Miró y Picasso de la fundació Miró. Lo que proponemos aquí es una fuga: desde la mirada del pintor y su gesto con el pincel, a la performatividad de unas actrices que, a partir de la transformación, se apoderan de la pantalla y transgreden la condición de las musas.