Vecinos de Els Munts de Torredembarra están «hartos» de la situación de dejadez de una zona del barrio, focalizada sobre todo en la calle Oliveres y su enlace con la plaza de L’Ermita. En este tramo no hay aceras ni alumbrado público, y los residentes critican que no se realizan los trabajos de limpieza necesarios. Aseguran que en los años 60 pagaron unas contribuciones especiales para que hicieran las obras, pero no llegaron a realizarse y hoy siguen esperando.
«El Ayuntamiento justifica que no encuentra los documentos. Han pasado muchos gobiernos distintos, pero todos nos dan largas y nadie nos soluciona el problema. Los políticos no quieren mojarse, y los años van pasando», denuncia Elòdia Miquel, secretaria de la asociación de vecinos.
Los afectados llevaron el caso hasta el Síndic de Greuges, y aseguran que la última salida que les queda es ir a los tribunales. «El Síndic nos ha dicho que podemos hacer poco más que denunciar», lamentan. Y añaden: «El gobierno de Daniel Masagué hizo casi todas las calles del barrio menos esta. Es una gran vergüenza».
Los vecinos lamentan que no se trata solo de la mala imagen que ofrece la zona, sino de la seguridad. «No hay aceras ni luz por las noches. Los coches pasan deprisa, y es peligroso. ¿Qué hemos hecho nosotros para que no nos lo arreglen?», apunta Elòdia.
Nadal Pujol, otro de los vecinos que reivindican una solución, duda de que la mejor solución sea denunciar, pero no entiende cómo después de más de medio siglo no se han tomado medidas. «Además, es un lugar de paso, por ejemplo, para ir a la playa o al faro. No afecta solo a la gente que vive aquí. Y parece que a nadie le preocupa. Deberían encontrar estos documentos», lamenta Pujol.
La asociación de vecinos se fundó hace 25 años y sus integrantes aseguran que desde el primer día están «batallando» para tratar de hallar una solución. «El Ayuntamiento debe guardarlos y tener constancia. No puede decirnos que no encuentra los documentos. Nosotros pagamos, y la situación actual nos genera una gran impotencia», lamenta Lluïsa Márquez. Desde la entidad vecinal también se quejan de que en el municipio se han realizado obras nuevas, «y en cambio esta sigue sin terminar. Antes de hacer más cosas, deberían acabar las viejas». También están indignados por la falta de limpieza. Martine, otra residente en Els Munts, afirma que «al menos deberían cortar hierbas y arreglar un poco todo esto. Está lleno de basura».
Aunque dicen que no es su intención, los vecinos no han descartado acudir a la justicia. De momento, esta semana se reúnen con varios partidos para trasladarles sus preocupaciones.
Sin recaudación propia
El Ayuntamiento dice que es consciente de las reivindicaciones. Puntualiza que este tramo afecta directamente solo a dos viviendas. Y apunta que un vecino que compró una casa se presentó al Ayuntamiento con documentos de otras personas que en su época habían pagado las contribuciones especiales. El consistorio apunta que ha estudiado el caso y se ha analizado desde el departamento de intervención, pero insiste en que aún faltan documentos que acrediten que realmente se pagaron las contribuciones.
Fuentes municipales recuerdan que la situación se remonta a principios de los años sesenta, y que entonces el Ayuntamiento no tenía recaudación propia. «Posteriormente se traspasó a BASE de la Diputació y al Ayuntamiento, y no consta documentación de aquella época», apuntan. Insisten en que es el interesado quien tiene que demostrarlo.
