Usuarios de la estación de Renfe de Calafell critican que para entrar o salir del recinto ferroviario sólo haya una pequeña puerta de acceso. Según explican es insuficiente para el volumen de usuarios que la instalación tiene en las horas punta. En este sentido señalan que cuando coincide un tren de llegada y otro de salida en la única puerta se generan tapones que motivan incluso enfrentamientos.
«Si alguien llega con prisa para coger un tren se encuentra con los que salen, que no dejan pasar y hay discusiones», explica Juan, usuario habitual de la estación.
No es el único que coincide en la protesta. Los viajeros del tren señalan que el edificio cuenta con dos puertas pero una está permanentemente cerrada y piden a la compañía ferroviaria que la abra para mayor comodidad.
De hecho las dos puertas dan al mismo vestíbulo donde están las taquillas, las máquinas expendedoras de billetes, la cafetería y los tornos de acceso a los andenes de la estación.