Si la Fira Multisectorial es una de las celebraciones inherentes al calendario festivo y social de Cambrils, no lo es menos el Homenatge a la Vellesa, que se celebra igualmente desde el año 1958 como una ocasión para agradecer el papel de la gente mayor en la sociedad cambrilense. Como es tradición, los avis y àvies de Cambrils se citaron el primer domingo de junio en el Palau Municipal d’Esports para compartir un ágape servido una vez más por la Associació d’Antics Alumnes de La Salle, entidad que este año celebrará 70 años de historia y compromiso con el municipio.
La celebración, que ya se recuperó el año pasado tras dos ediciones suspendidas por culpa de la pandemia, se convierte cada año en una cita para el reencuentro. Una comunión entre amigos y familiares, pero también entre generaciones. Ya sin mascarillas ni distancias de seguridad, los abrazos y el buen humor fueron la tónica. Un acto emocionante y emotivo que se ha convertido en un orgullo para Cambrils y no es para menos. Ceder el protagonismo a nuestros mayores, aunque solo sea por un día, como reconocimiento de todo el municipio a su labor. «Da gusto volver a ver así de lleno el pabellón. Esto es lo mejor de la Fira», comentaba un grupo de amigos antes de entrar.
El Homenatge a la Vellesa llenó una vez más el pabellón cambrilense, con la participación de unas 650 personas, además de las autoridades, las pubilles y hereus, y de un equipo de voluntarios y voluntarias que sumaban otras 120. Muchos de ellos chicos y chicas jóvenes que combatieron como pudieron el calor y se encargaron de montar todas las mesas y de servir con la mejor de sus sonrisas la comida a los mayores. La música de fondo, con los pasodobles que tocó en directo la banda de música, ambientaba cada plato.
El alcalde en funciones, Oliver Klein, se encargó de dar la bienvenida a todos los participantes, asegurando que «si de alguna cosa se puede estar contento y orgulloso de ser cambrilense, es esta». Klein agradeció la labor de todos los que hacen posible este acto cada año y dijo que «es un homenaje de toda la población a su gente mayor. La que ha nacido o ha venido a vivir a Cambrils, que ha trabajado y aportado. Que por muchos años esta sea su fiesta». Y es que, además de la Triple y del Ayuntamiento, el homenaje cuenta con la colaboración de otras entidades del municipio, como la Cooperativa Agrícola o la Confraria de Pescadors, así como comercios, empresas y cambrilenses a título personal que se vuelcan cada año con la organización.
«Los primeros estatutos de los Antics Alumnes de la Salle, hace 70 años, ya decían que uno de los objetivos de la asociación era fomentar la amistad. Y desde entonces ese ha sido y es el gran objetivo de nuestra lucha», manifestó Salvador Olivé, presidente de la asociación. Olivé describió el Homenatge a la Vellesa como «un encuentro de amigos, amigos de adultez, de juventud y de madurez. Un encuentro para compartir recuerdos y vivencias alrededor de una mesa».
Y eso es precisamente lo que hicieron los 650 participantes en el homenaje. Cambrilenses mayores de 75 años, muchos de ellos acompañados de sus familiares, que aprovecharon la ocasión para reencontrarse con viejos amigos y para hacer nuevos, porque nunca es tarde para eso de cultivar amistades. Antes de sentarse a la mesa, los mayores compartieron un rato a las puertas del pabellón, donde recibieron una rosa y pudieron hacerse una foto de recuerdo en el photocall. Al final, una vez servidos los postres, fue el turno para animarse con los bailes. El broche de oro para un homenaje que vale oro.
