Oliver Klein va a agotar todas las opciones en su mano para mantener la alcaldía en Cambrils tras el pacto entre ERC, PSC, Junts y En Comú Podem que le manda a la oposición. Su partido, Nou Moviment Ciutadà per Cambrils (NMC), ha presentado dos recursos a la Junta Electoral de Zona de Reus para impugnar las actas de las votaciones en cuatro mesas el pasado 28 de mayo. El primero fue desestimado, pero la formación municipalista ha vuelto a reclamar.
Si esta vez prosperase y se dieran por nulas esas votaciones podría producirse una carambola y variar el resultado: Activem, que se quedó a cinco votos de ERC para entrar en el Ayuntamiento, podría lograr un concejal en detrimento de los republicanos, que pasarían de cuatro a tres. Esto trastocaría el pacto a cuatro bandas, pues se quedaría en unos insuficientes diez ediles.
El NMC alega que las actas de escrutinio de estas mesas presentan irregularidades. Asegura que «no coincide el contenido de las actas que hay en cada uno de los tres sobres de documentación electoral; se han hecho correcciones en las actas y el número de votos que figura en ellas excede el número de electores censados que votaron en la mesa».
Klein ganó las municipales con 6 concejales, pero ERC (4), PSC (3), Junts (3) y En Comú Podem (1) decidieron aliarse y acordaron los tres primeros años de alcaldía para el socialista Alfredo Clúa y el último para ERC.
