La rambla de El Vendrell suele ser un punto conflictivo a horas nocturnas que provoca inquietud en los vecinos por la concentración de determinados individuos y que motiva la presencia policial.
En las pasadas fiestas navideñas se ha realizado una prueba de urbanismo táctico para incrementar la seguridad.
Las bombillas zigzaguando por todo el paseo, además de una pretendida animación navideña, tan tenido la intencionalidad de la seguridad al incrementar la iluminación en la zona.
El concejal de la Policía, Christian Soriano, considera que el objetivo de la seguridad se ha logrado «y se ha reducido a cero las llamadas de los vecinos» por la intranquilidad.
Más público
Por ello se ha decidido que esas bombillas a modo de cubierta en la Rambla permanezcan los viernes, sábados y domingos ya que es el momento en el que el paseo puede tener una mayor asistencia de público y de clientes en los restaurantes y locales de la zona.
Los urbanistas señalan la importancia de la iluminación para la seguridad. Y es mejor la luz blanca que la amarilla
Soriano explica que por la estructura de la Rambla, los bancos, y una escasa iluminación puede provocar esa sensación de inseguridad y que sea punto de concentración de grupos que generan intranquilidad.
Esas luces, además de en Navidad, ya suelen colocare durante fiestas como la Fira de Santa Teresa o la Xatonada. Ahora permanecerán durante los fines de semana de manera que también permitan una mayor dinamización de la zona.
Los urbanistas reiteran que la iluminación es fundamental para una mayor sensación de seguridad en las calles y plazas. Incluso explican que debe poderse identificar el rostro de los demás peatones del mismo espacio hasta una distancia de 10 metros y que la luz blanca da más seguridad que la amarilla y que la colocación de los puntos de luz debe ser estratégicamente colocada para evitar zonas de sombra.
En la Rambla además está a favor que no hay esquinas ni obstáculos que generen puntos ciegos. Es lo que se define como las líneas de visión. El que haya locales y comercios con ventanales también contribuye a la seguridad ya que parece que hay una constante vigilancia.
Añaden que es imprescindible el mantenimiento de la zona para transmitir el mensaje de constante vigilancia.
El urbanismo táctico por la seguridad se extenderá a otras zonas del municipio
Soriano explica que la solución de la Rambla podrá extenderse a otras zonas donde puedan detectarse situaciones de intranquilidad entre los vecinos y para evitar puntos conflictivos.
El concejal de El Vendrell reitera que el incremento de la luminosidad ha ayudado sacar de la Rambla a las personas que generaban conflictos. «Se ha desincentivado que pudiera cometerse algún hecho delictivo».
Soriano apunta que el «urbanismo táctico» debe ayudar no sólo a reaccionar ante los hechos delictivos sino también a prevenirlos.
