Después de unos días de lluvias en algunas partes del territorio catalán, los termómetros volverán a subir hasta cinco grados por encima de lo normal. Pero, según informan desde el Servei Meteorològic de Catalunya (Meteocat), no se trata de una ola de calor.
Las zonas más afectadas por el calor serán los municipios de Ponent y L’Empordà, los cuales podrían superar hasta los 40 grados.
Respecto a las localidades costeras, como pueden ser muchos municipios de Tarragona, además del habitual calor diurno, también se esperan noches especialmente cálidas.
Algunos modelos sugieren que a partir del jueves el calor podría ir a más y alcanzar valores extremos y, quizás, hasta dar pie a otra ola de calor en toda España.