Vall de Hebrón trata el primer paciente de cáncer con una terapia celular propia

El tratamiento con TIL crea un ejército de células del mismo enfermo para atacar de manera más eficaz el tumor

30 junio 2022 10:37 | Actualizado a 30 junio 2022 10:45
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Vall de Hebrón trata el primer paciente con cáncer con una terapia celular propia basada en células TIL, linfocitos -células inmunitarias- que se encuentran de manera natural en el tumor. La terapia, desarrollada íntegramente en el Vall de Hebrón Instituto de Oncología (VHIO), consiste en extraer linfocitos para reactivar su funcionalidad y expandirlos fuera del cuerpo, en el laboratorio, para después volverlos a administrar al paciente.

«Se trata de crear un ejército de células del mismo paciente que nos ayude a atacar de manera más eficaz el tumor», resume Elena Garralda, directora de la Unitat de Recerca de Teràpia Molecular contra el Càncer (UITM)–CaixaResearch.

Y es que a pesar de que los linfocitos se encuentran al tumor, en muchas ocasiones son poco activos o hay pocos, hecho que no permite eliminar las células tumorales de manera efectiva, y, como consecuencia, los tumores continúan creciendo.

Por las características propias del sistema inmunitario, la preparación de este tratamiento se hace de manera personalizada, para cada paciente, y pasa como mínimo un mes y medio desde que se obtiene la biopsia tumoral a partir de la cual se obtienen los TIL del paciente candidato hasta que recibe el tratamiento.

Según explica la doctora Garralda, este mes y medio es el tiempo que hace falta para poder expandir una cantidad bastante grande en el laboratorio para poder administrarlas de nuevo al paciente. Durante este periodo el enfermo continúa con su tratamiento habitual y en el momento que el tratamiento deja de responder, es cuando se procede a la infusión de las células TIL, ya previamente preparadas.

Antes de la inoculación hace falta que el paciente haga un tratamiento con quimioterapia a dosis altas que destruya los linfocitos que ya tiene, para dejar espacio para las nuevas células TIL. Una vez infundidas, los pacientes reciben varias dosis de interleucina-2 (IL-2), que contribuyen a expandir y activar estas células, un tratamiento que genera efectos adversos –una elevada toxicidad– a corto plazo, por lo cual se administra en la Unitat de Teràpies Avançades en Hematologia (UTAH) del Hospital Universitari Vall d’Hebron.

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