El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, ha avanzado este miércoles que Catalunya tendrá «pronto» las competencias en inmigración, cuyo traspaso negocia el Gobierno de Pedro Sánchez con Junts.
En la sesión de control al president en el Parlament, Illa ha señalado que «parece que pronto» el Govern tendrá las competencias en inmigración, un traspaso del que ha asegurado que se «alegrará» cuando se haga efectivo.
Este traspaso es una de las condiciones de Junts para respaldar los presupuestos generales del Estado de 2025 y desde las filas posconvergentes ya habían señalado que se había avanzado «muchísimo» y que el acuerdo podría cerrarse antes de final de año.
En una réplica al presidente del grupo parlamentario de Vox, Ignacio Garriga, que ha denunciado las políticas de inmigración «devastadoras», Illa ha remarcado que, según dato del último estudio del Centro de Estudios de Opinión, «la mayoría de los catalanes tiene una visión positiva de la inmigración y una actitud de acoger».
«Le podría responder que la Generalitat no tiene todavía, porque parece que las tendremos pronto, y me alegraré, competencias en inmigración, pero no escondo la cabeza debajo del ala», ha señalado Illa.
El president ha subrayado que la acogida y la integración de los inmigrantes forma parte de la historia de Catalunya: «Esto no pone en riesgo nuestra identidad, sino que la mejora».
Asimismo, ha reprochado a Garriga que intente «sacar rédito político» de la inmigración porque «es un camino profundamente equivocado» y ha celebrado la decisión del Gobierno de aprobar un nuevo reglamento de extranjería que permitirá regularizar a 900.000 migrantes en tres años.
“No me temblarán las piernas para enfrentarme a los grupos de privilegio”
Además, el presidente de la Generalitat ha asegurado este miércoles que trabajará para encontrar “medidas efectivas” que frenen la crisis de la vivienda y el aumento de los alquileres, subrayando: “No me temblarán las piernas para enfrentarme a los grupos de privilegio”.
Tras la multitudinaria manifestación del pasado sábado, en la que se exigió una reducción en los precios de los alquileres, Illa insistió en que la cuestión de la vivienda es “una prioridad máxima” para su gobierno. No obstante, advirtió: “No lo resolveremos ni en una semana ni en un mes”.
Albiach pidió al presidente que sus “buenas palabras” se traduzcan en “propuestas presupuestarias” acordes a la gravedad del problema, destacando que los Comunes “hacen bandera” de este tema, según el propio Illa.
“No pedimos magia ni varitas mágicas, sino la intervención del mercado para ofrecer tranquilidad y estabilidad a la ciudadanía”, afirmó Albiach.
Por su parte, Vega señaló que la subida de los alquileres “divide a la sociedad en dos: entre unos pocos (los grandes propietarios) y la mayoría (los inquilinos)”. Criticó que los socialistas busquen mantener “un equilibrio entre ampliar derechos de la población y no tocar los derechos de unos pocos”, algo que, según ella, es inviable.
Planteó “propuestas realistas” aplicadas en otros países de Europa, como hacer que los contratos de alquiler sean indefinidos o incrementar los impuestos a quienes posean más de cinco inmuebles “para evitar que hagan negocio”.
Illa respondió que está dispuesto a reunirse “con todos” y no tendrá inconveniente en debatir sobre “propuestas aceptables”.