Esta semana has dado la bienvenida al verano. Por delante te esperan días de calor, de mucho calor. No deberías perder la motivación de hacer ejercicio ya sea en junio o en noviembre. Y deberías tener las mismas ganas de empezar si todavía no te has calzado las zapatillas deportivas. Según el entrenador personal del centro Body Viu de Reus, Marc Torrents, «empezar a entrenar es una buena idea ya sea en verano o en invierno. Solo hay que tener en cuenta que las condiciones de temperatura, humedad y horas de sol serán diferentes».
Si el único ejercicio que has hecho en los últimos meses ha sido ver el final de la Liga de fútbol por televisión o celebrar los títulos de tu equipo favorito, deberías pensar en tu salud antes de empezar a hacer deporte. Si cumples las anteriores condiciones lo más recomendable es, según el experto en actividad física, que te pongas en manos de un profesional para que te asesore y te indique lo que debes hacer para empezar a entrenar en verano.
«No es excluyente entrenar en un centro de entrenamiento personal y que dicho profesional te aconseje que deberías de salir a caminar o correr uno o dos días por semana, por ejemplo. Debemos disfrutar del verano y aprovechar el buen tiempo para poder hacer actividades outdoor», afirma Marc Torrents.
Él mismo destaca que si la opción es al aire libre lo más aconsejable es aprovechar los extremos del día, o bien temprano, cuando aún no ha empezado a hacer demasiado calor, o por la tarde-noche que el calor ya empieza a bajar. «Esto dependerá de cada persona, del turno de trabajo, de la familia, de si una persona está más activa por la mañana o por la noche, etc.», afirma.
Plan de entrenamiento
En invierno llueve y hace frío y en verano el calor te asfixia a todas horas. ¿Debes cambiar el plan de entrenamiento en función de la previsión del tiempo de cada día? En opinión del entrenador personal «puedes modificarlo porque no son las mismas condiciones climatológicas, pero sobretodo deberías cambiar el plan de entrenamiento en función de tu objetivo, no de otros elementos externos a ti».
En esta línea, la intensidad de las sesiones de entrenamiento puede ser la misma que siempre. Según el experto en actividad física si eres corredor, por ejemplo, deberás de levantarte antes o entrenar por la noche y aprovechar las horas de menor calor, para no fallar en tu programa de entrenamiento. Ser constante y no tirar la toalla es importante.
En verano ¿definición, volumen, fuerza o mantenimiento? «En verano lo que se estila en los gimnasios es la definición. Como ya sabemos llega la playa y a todo el mundo le gusta mostrar la mejor versión de sí mismo. Pero como comentábamos antes esto dependerá del objetivo a corto o largo plazo de cada persona», afirma Marc Torrents.
La ropa fresca, transpirable y ligera te ayudará a no bajar el nivelSuda la camiseta adecuada
¿Qué debes llevar y qué no para entrenar en verano? El sentido común te lo dice: ropa fresca, que transpire bien, ligera, etc. Y además el entrenador personal aconseja «evitar el algodón, ya que es más fácil que se empape de sudor y nos sea incómodo para seguir entrenando». También puedes llevar camisetas de tirantes o manga corta y si puede ser de poliéster mucho mejor, ya que evacuan el sudor mucho más rápido. Los pantalones mejor que no sean mallas ya que dan bastante calor. Lo mejor es un pantalón corto. También debes proteger tus ojos del sol si entrenas al aire libre. Además de esquivar los rayos UV, las gafas te protegerán, según Marc Torrents, «de elementos externos, como piedrecitas o bichos. Y además te ayudarán a ver mucho mejor el camino o el reloj, si las llevas, actuando contra los destellos del sol».
La hidratación es un aspecto fundamental. «La sed es el primer síntoma de deshidratación. Lo mejor es beber agua de forma regular. Mareos, desorientación, pulso elevado, temperatura corporal elevada, dolor de cabeza, náuseas... todo esto puede venir provocado por un golpe de calor». Toma las precauciones necesarias para disfrutar del verano mientras te pones en forma.