ERC ha obtenido este domingo su peor resultado electoral desde 2010 y la caída de escaños más dura de su historia. La formación liderada por el presidente Pere Aragonès ha perdido 13 escaños y se ha quedado sólo con 20, con un 13,6% de los sufragios.
Con estos resultados, ERC ha cedido el liderazgo del independentismo a la candidatura de JxCat de Carles Puigdemont, convirtiéndose así en la tercera fuerza en el Parlament.
En las últimas elecciones, en el 2021, también con Pere Aragonès como candidato, ERC fue la segunda fuerza en votos y escaños, con 605.581 votos y el 21,3% de los sufragios, empatado en escaños con los socialistas de Salvador Illa. Entonces, ERC fue primera fuerza en Tarragona, pero ahora no ha logrado imponerse a ninguna demarcación.
ERC fue el partido que perdió más votos en estos comicios, retrocediendo en más de 190.000, y cayendo en 7,6 puntos porcentuales. ERC había obtenido un 21% de los votos tanto en las elecciones del 2021 como en las del 2017, aunque en el año del referéndum la cifra absoluta fue mucho mayor, con 935.861 sufragios.
En Barcelona, ERC pierde 7 escaños y se queda sólo con 12, dejando fuera, por ejemplo, al exconseller Juli Fernàndez. En Girona pierde la mitad y obtiene 2, quedando sin escaño Anna Torrentà y Jordi Orobotig. En Lleida, Marta Vilalta pasa de 5 escaños a 3, al igual que en Tarragona, donde lideraba la lista la portavoz Raquel Sans.
ERC no ha logrado capitalizar el efecto de la presidencia de la Generalitat, y como ya le ocurrió a JxCat en los últimos comicios, ha pasado de ser el partido del máximo representante del país en la tercera fuerza en el Parlament.
Sin embargo, es la primera vez que esto mismo ocurre con la formación presentando a la reelección al propio presidente, ya que en 2021 Quim Torra no lideraba la lista de Junts, que encabezaba Laura Borràs como candidata efectiva, con Puigdemont de número 1.
Los peores resultados de ERC de la historia democrática actual fueron en 1988, con solo 6 escaños, pero en tiempos más recientes, el dato más malo fue después del tripartito, cuando el partido entonces encabezado por Joan Puigcercós tan sólo logró el 7% de los votos, con 219.173 papeletas y 10 escaños.