La principal incidencia que afecta la puntualidad de la línea R16 es la avería en la estación de Mont-roig del Camp. Se produjo el pasado 7 de junio cuando un cable del sistema de electrificación que cayó sobre la catenaria.
El contacto entre los cables originó incendios que inutilizaron los sistemas de gestión de tráfico, comunicaciones, señalización e instalaciones de seguridad.
Durante los primeros días y semanas los retrasos fueron de una hora de media, ya que buena parte de los procesos se tenía que realizar de forma manual.
En algunos casos, los trayectos entre Tortosa y Barcelona se alargaron más de cuatro horas, para desesperación de los usuarios.
Este mes de agosto los retrasos por esta incidencia se han reducido, ya que poco a poco se han ido reponiendo el cableado y automatizando algunos de los procesos que habían quedado fuera de servicio, de manera que se ha podido recuperar cierta velocidad al paso por este punto, por el que circulan los trenes de la R16, la RT2 y los trenes de media distancia del Corredor Mediterráneo.
Plazos
Pero según detalla el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF), todavía está pendiente la reposición del enclave, la maquinaria que regula todas las infraestructuras de la estación, como los semáforos de paso o el cambio de agujas.
De este mecanismo no hay repuestos, se fabrica a medida y tiene un plazo determinado de entrega.
«Avanzamos los trabajos lo más rápido que podemos, pero de momento el plazo para que la incidencia esté totalmente solucionada se mantiene en el mes de octubre», según explican al Diari fuentes de Adif.