Usuario de Tarragona: “Voy al aeropuerto y he tenido que salir 5.00 antes porque no quiero perder el vuelo”

Los usuarios de Tarragona que habitualmente toman el tren desde la estación de Tarragona han cogido los primeros autobuses habilitados por el plan alternativo de transporte desde el lado de la estación de autobuses, en el centro de la ciudad.

La mayoría de ellos estaban informados sobre los cambios de horarios y para algunos ha supuesto madrugar para poder llegar a tiempo a Barcelona. “Voy al aeropuerto y he tenido que salir cinco horas antes porque no quiero perder el vuelo”, ha expresado Juan Monsalve a la ACN.

La portavoz de la plataforma Dignitat a les Vies, Ana Gómez, ha explicado que algunos de los conductores se han perdido, pero que los autobuses han circulado sin incidencias destacables. “Esperamos que el servicio no empeore a lo largo del día”, ha dicho.

Desde las cinco y media de esta mañana han desfilado autobuses desde la parada habilitada en el centro de Tarragona, al lado de la estación de autobuses. A primera hora, se han formado colas de viajeros para tomarlos. Andreu Fernández es uno de los primeros usuarios que ha utilizado el servicio alternativo para llegar al trabajo en Barcelona. “Vengo a buscar el autobús de las 6:20 h y tomo el de las 6:10 h, los horarios ya no me cuadran, hoy probamos cómo va el día”, afirmó. Él ha tenido que levantarse media hora antes para hacer el trayecto.

En cambio, para Víctor Vilanova, el cambio de ubicación le es favorable: “Voy a Vilanova a trabajar, vivo por aquí y me queda más cerca la parada, me beneficia un poco”. Este viajero también ha dicho que espera que “todo vaya bien” y que probará si funciona el servicio alternativo por carretera. “Consulté la web y lo tengo bastante organizado”, comentó.

Otra usuaria, Isabel Sastre, ha explicado que toma el tren tres veces a la semana para ir a trabajar a Barcelona. La ida la tiene resuelta porque los horarios le cuadran, pero el problema, asegura, será la vuelta. “Me preocupa el transbordo en Sant Vicenç, no sé si tendré que esperar mucho”, ha señalado. Ella tomó el autobús de las seis y media de la mañana.

El mismo autobús que tomó Juan Monsalve, quien ha tenido que levantarse muy temprano para poder llegar a tiempo al aeropuerto del Prat. “He tenido que salir cinco horas antes para poder hacerlo todo, no puedo perder el vuelo”, dijo. En su caso, como va a menudo a Barcelona, se está planteando otras opciones, como compartir coche o incluso irse a vivir a la capital catalana durante una temporada.

Poca afluencia en la parada de la estación de trenes

Los primeros autobuses desde el centro de Tarragona se han llenado. Sin embargo, a partir de las siete y media de la mañana de este martes, la afluencia de viajeros se ha reducido en esta parada. Algunos de los autobuses directos a Sant Vicenç de Calders se han ido con apenas una decena de pasajeros. Una situación similar se ha vivido en la estación de trenes de la ciudad, el segundo punto donde se habilitó una parada, ya que durante las primeras horas no ha habido muchos usuarios y los autobuses se han ido prácticamente vacíos. Los informadores de Renfe han asegurado que había muy pocos pasajeros.

La portavoz de la plataforma Dignitat a les Vies, Ana Gómez, ha explicado que los primeros autobuses “han salido bien” y que los usuarios han podido tomarlos sin problemas. “Algunos conductores son de fuera y se han perdido, el primero de Tarragona se saltó la salida de Sant Vicenç, a algunos les ha costado llegar a la parada”, señaló Gómez. La portavoz también apuntó que “mucha gente” ha preferido utilizar el vehículo privado este primer día para evitar ser “conejillos de indias”.

Paralelamente, Gómez ha lamentado que no se haya encontrado una solución a la falta de plazas de aparcamiento en la estación del Camp de Tarragona, ya que muchos usuarios deben aparcar en los terrenos de alrededor, donde se producen robos y donde pueden ser multados. Además, también se quejó de que no se puedan validar los billetes desde Tarragona. Ante esto, recomendó a los viajeros que los compren, si tienen tiempo, en Sant Vicenç y los validen para no viajar sin seguro.