La AP-7 en Tarragona o la pesadilla de conducir al ralentí muchos kilómetros

El fin de semana cierra con un accidente múltiple y sin heridos entre L’Ametlla y L’Hospitalet de l’Infant. Antes, tres camiones y otros dos siniestros con turismos han causado colas interminables. Lo único positivo, no hay heridos graves ni muertos

El tercer fin de semana de julio se ha convertido en el más complejo para circular por la AP-7. En el tramo de Tarragona se han registrado seis accidentes, tres de ellos provocados por camiones. Por suerte, en ninguno de los seis siniestros hay que lamentar víctimas mortales ni heridos de gravedad.

El tramo que discurre de la AP-7 desde la frontera con Barcelona, en el punto kilómetrico 206 hasta cruzar con Castellón, pk 322 aproximadamente, suma casi 120 kilómetros de longitud. Y estos tres días, desde la madrugada del viernes, a las 3 se registró el primer accidente de un camión en El Vendrell, hasta la tarde-noche del domingo, con una colisión en cadena entre vehículos entre Calafat y L’Hospitalet de l’Infant, han provocado decenas de kilómetros en ambos sentidos de la marcha a consecuencia de la evacuación de los heridos, apagar incendios o extraer las mercaderías primero y los vehículos implicados, después.

Desde septiembre de 2020 la autopista se abrió a la gratuidad por fases y un año más tarde, los 120 kilómetros ya no tenían peaje. Ello ha motivado un incremento del tráfico, de vehículos pesados y de accidentes. Este fin de semana ha sido caótico para muchos conductores, pero no ha sido la primera vez.