Las mujeres, protagonistas en la Fira del Vi de Falset
El ‘Tast amb Dones’ es un encuentro del Priorat actuó como catalizador y la iniciativa se ha extendido a mujeres de todo el país, con actos también en Barcelona y Madrid
10 de la mañana en Gratallops. Un grupo de mujeres se preparan para el Tast amb Dones, una iniciativa que empezó en 2009, de la mano de Anne Cannan de Clos Figueras, para dar visibilidad a las mujeres que hacen vino dentro del Priorat. Este domingo en Gratallops serán 17 mujeres de la DO Montsant y Priorat quienes presentan sus vinos pero en realidad son ya más de 65 las que forman parte del colectivo Vino de Mujeres.
Este encuentro del Priorat actuó como catalizador y la iniciativa se ha extendido a mujeres de todo el país, con actos en Barcelona y Madrid. «Cada día la mujer está más presente en el mundo del vino. Cada día somos más», afirma Anne Cannan. ¿Más? ¿Con qué objetivo?, les pregunto. «Visibilidad, simplemente eso», responde.
El patio de Clos Figueras se llena de visitantes, unas 200 personas, entre ellos un autobús lleno de turistas suecos encantados con el Priorat. «Es un evento formidable que te permite descubrir los maravillosos vinos de la región hechos por mujeres que por naturaleza tienen un cuidado y una atención especial», afirmaba una pareja de visitantes de Estocolmo. Otra pareja viene de Barcelona. «Nos pareció una buena iniciativa para descubrir proyectos pequeños y especiales, y que sean mujeres nos encanta».
A ellas, sin embargo, no les gusta la confrontación de géneros. A la mayoría les cuesta reivindicarse solo como mujeres del vino. Son ante todo viticulturas, elaboradoras, enólogas, sumilleres, comunicadoras....
«Yo vengo de una familia de payeses y en el campo, la mujer siempre ha trabajado mucho, siempre», afirma Ester Nin. Nadie lo duda, pero hoy ellas saltán sin miedo a la palestra. Son emprendedoras, profesionales y seguras. Es el caso de Alba Domènech, celler Constel·lats, un proyecto joven nacido en 2019 que elabora vinos 100% naturales, sin sulfitos ni químicos añadidos.
O Silvia Puig, celler Números Vermells. «Hago los vinos que me gustan, lo que siento que merecen la pena y ello me ha llevado a tener 9 referencias con solo 10.000 botellas». Algunas llevan más tiempo en el sector como Sandra Doix, del celler Marla. «No existe un perfil de vino masculino o femenino pero sí una expresión, una manera de sentir y contar el vino que en la mujer es más emocional».
Lo cierto es que todas las mujeres presentes aman lo que hacen y viven el vino con pasión. Confían en su trabajo y les gusta colaborar. Y aunque no lo verbalizan, se intuye que queda aun camino por recorrer: a menudo sus logros no reciben el mismo nivel de reconocimiento; en la mayoría de eventos, listas y portadas que se habla de vinos predominan los hombres.
Y lo más importante, las mujeres siguen sin alcanzar las altas posiciones directivas. Ni en los consejos reguladores, los grandes grupos bodegueros, los ministerios o las asociaciones vinícolas. Y por ello, el Tast de dones es solo de mujeres. Para concederles su espacio, escuchar su voz, reconocerles sus méritos y visibilizar su contribución al mundo del vino.