‘Teixint’ puentes entre Josep Royo y jóvenes artistas de Salou

El pasado (de dónde vengo), el presente (dónde estoy) y el futuro (hacia dónde voy). Lejos de confiar en una conexión divina que arroje luz a estas tres grandes cuestiones de la humanidad, alumnos y alumnas de segundo de bachillerato de artes plásticas del Institut Jaume I de Salou han tejido puentes entre su yo interior y la obra del artista Josep Royo, conocido por sus manos maestras con el tapiz.

La exposición Teixint es el resultado de la última edición del proyecto Diàlegs, amb la col·lecció. Una colaboración entre el Museu d’Art Modern de la Diputació de Tarragona (MAMT), donde la muestra se puede visitar hasta el próximo 26 de enero de 2025, y el centro educativo. La primera edición de la iniciativa se confeccionó con el servicio MAMT Pedagògic el curso 2012-2013.

Desde entonces, ambas instituciones ha bordado complicidades artísticas. En esta ocasión, los y las estudiantes han tirado del hilo de la exposición retrospectiva Una forma oberta que cau a pes, organizada por el MAMT con la finalidad de restituir la figura de Josep Royo en el contexto del arte contemporáneo. Al respecto, el director del MAMT, Manel Margalef, afirmó que «Diàlegs es un proyecto importante porque establece vínculos con el trabajo y la producción artística».

Una opinión compartida por Montserrat Martínez, profesora del Institut Jaume I. «La iniciativa permite a los alumnos expresar sus vivencias a través de conceptos abiertos, como inercias, evolución, metamorfosis... que les permiten comenzar a trabajar su propio lenguaje, además de conocer a otros artistas locales y la labor de los museos».

Siguiendo el mismo hilo, alcalde de Salou, Pere Granados, resaltó que «el arte es un lenguaje que va más allá de las palabras; muchas veces no podemos manifestar con palabras aquello que sí podemos reflejar a través de una obra de teatro, la danza, etc.».

Inspirándose en los tapices de Josep Royo, los alumnos han dibujado con hilo, cosido sobre papel, fusionado el trazo de dibujo e hilo cosido, desgarrado, agujereado, cortado, unido y recosido, jugado con las texturas visuales y táctiles, manteniéndose en una gama de colores afín al artista.

«Para mí, el proyecto Teixint ha sido la oportunidad de poder dar el «último adiós» al daño que le hicieron a mi corazón. He aprendido a llevar mi mente a un lugar increíble mientras hacía la obra», reflexiona Rocío Romero, autora de Ordint al teu cor.

A través de Branques teixides, el joven Matías Bolart ha hilvanado «el sentimiento de preocupación a lo largo de la vida. La esquina de un papel roto desde donde se comienza a escribir todo: yo vengo de un pasado, con una mentalidad en la que solo pensaba en el presente y dejaba recibir información de todos lados».

En cambio, las telarañas han sido la fuente de inspiración para Juan José Camacho para tejer una obra única, en la que «los nudos hacen referencia a los puntos más importantes como la familia, los amigos, el arte y el deporte, es decir, todo lo que me conforma».

Con cada experiencia, el ovillo de la vida se enreda y desenreda. Una madeja que puede llegar a asfixiarnos si el devanado es demasiado fuerte. «Para mí, Teixint es representar la sociedad a través del cuerpo humano. Cuando a veces el mundo te asfixia con responsabilidades, presiones o con miedos, y no te deja respirar; y la única manera de hacerlo bien es con estímulos externos, como un inhalador para tratar el asma», expresa Aroa Zaratan. Dice la joven artista, «a consecuencia del asma yo no puedo practica deporte sin toser. Por ello, he querido titular la obra Un altre respir, ya que es lo que hacemos toda la vida».

Para Valentina Rembado, Teixint es «paz». «Todo lo que tiene que ver con coser o tejer me aporta paz, ya que mientras lo estoy haciendo, me olvido de las preocupaciones, básicamente mi mente se relaja. Por esta razón, mi obra es un corazón que ha sido cosido unas cuantas veces con diferentes hilos o telas». A través del proyecto Teixint, la artista ha encontrado La cura.