Artes escénicas, a pecho descubierto en La Mussara
El Festival Mussart celebrará este sábado su decimoquinta edición inspirada en Mercè Rodoreda
La decimoquinta edición del Festival Mussart se manifestará, el sábado 5 de agosto, a partir de las 18.30 horas en La Mussara, como un juego de diferentes disciplinas artísticas. Música, literatura, pintura e interpretación unirán sus fuerzas bajo el leitmotiv 5 viatges i 8 flors, y que se inspira en la obra Viatges i flors de Mercè Rodoreda, escrito por la autora en diferentes épocas de su vida en Romanyà de la Selva y durante el exilio en Ginebra, y publicados en un mismo libro. Las entradas están disponibles en la web festivalmussart.cat.
«Mercè Rodoreda llegó a decir que si me preguntasen cuál de mis libros querría salvar de un incendio escogería este», recordó el concejal de Cultura del Ayuntamiento de Vilaplana, Àlvar Fortuny en la presentación del festival, que este año estrena dirección artística a manos de la actriz y vecina de Vilaplana, Mercè Mariné.
Primero, a las 18.30 horas, la periodista Coia Ballesté conversará con el compositor reusense Joan Magrané en relación con la obra Alguns cants òrfics que interpretará el Quartet Gerhard. «Joan Magrané destaca por su trayectoria en el mundo de la composición contemporánea y el Quartet Gerhard por su talento a nivel europeo y mundial», afirma la directora artística.
Siguiendo con la programación, Mercè Mariné también subraya la participación en la ruta literaria de personas con vínculos heterogéneos con el arte (19.30 h). «Contamos con la colaboración de una profesora de fisioterapia y con un interés especial por el mundo del arte, el cine, la literatura; un joven que ha hecho sus pinitos en el teatro y es un apasionado de las artes escénicas; una editora; un maestro; y una gran lectora adolescente a las puertas de cumplir 16 años, entre otros», explica Mercè Mariné. La misma da valor a la oportunidad de «escuchar voces de personas con mucho amor por el arte»: Isabel Salvat, Jordi Mateu, Sílvia Chaparro, Judit Abelló, Carme Martí, Mercè Mariné y Quartet Gerhard.
Paralelamente a la ruta literaria, Adela Blasi, Xavi Huguet, Pep Mariné, Anna Mateu, Dolça Mújico, Nati Toral y Helena Vilanova pintarán obras inspiradas en los textos de Mercè Rodoreda. «En Viatges i flors, la escritora habla de flores y casi ni las nombra, es una explosión de fantasía, imaginación, juegos de sinestesia, es decir, relacionando el color con el gusto o el olor con el color», detalla la directora artística del festival, quien añade que «en algunas de las obras de Mercè Rodoreda es patente la influencia artística de Kandinsky».
Por su parte, el concejal de Cultura enfatizó que «algunas de estas obras se pintarán en directo en el festival, por lo que pensamos que este elemento dotará de un rasgo diferencial la ruta literaria». De esta forma, en un espectro parateatral, «unimos a personas que pintan y otras que leen para ensalzar el vínculo del arte y la literatura», en palabras de Mercè Mariné.
Por último, el Festival Mussart se clausurará con el concierto de Anna Andreu, que según la directora artística, «es la fuerza de la palabra, la fuerza de la emoción... Escucharla en directo es apasionante por su espontaneidad y capacidad de improvisación, ya que cualquier cosa que pasa alrededor es capaz de respirarla, vivirla y, después, plasmarla en una canción».
Doble sorpresa
Vista la programación, Mercè Mariné afronta esta edición con la voluntad de aportar su granito y hacer más grande la huella del arte. «Cuando el concejal de Cultura, Àlvar Fortuny, y el alcalde de Vilaplana, Josep Bigorra, me propusieron asumir la dirección artística del Mussart fue una doble sorpresa, porque nunca había pensado en esta posibilidad y por la ilusión que me hizo», confiesa Mercè Mariné, a quien le vinieron a la cabeza los recuerdos de cuando pronunció el pregón de fiestas en 2015. «Fue una experiencia emocionante», asegura.
Un sentimiento que ahora quiere revivir a través del Festival Mussart. «Para mí, más que hablar del arte -porque es absurdo, ya que cada uno tiene su opinión y tampoco se trata de ponernos todos de acuerdo-, lo importante es lograr que el derecho que tenemos de acercarnos al arte sea como una mancha de aceite», en otras palabras, «brindar la oportunidad a cualquier persona de poder leer, pintar o bailar frente a su pueblo, y, desde la empatía, la proximidad y la emoción, cambiar la mirada entre unos y otros».
«Cuando tienes la suerte de poder trabajar en equipo, y ves que propones una cosa y recibes diez mil a cambio, es un ejercicio de generosidad mutua», asegura la directora artística, para quien, ante la desazón de la vida, «la pintura, el teatro, la danza, la literatura, el circo, la escultura, y cualquier manifestación artística, son el remedio para desprendernos de las vicisitudes de la vida».