Catalunya financiará la entrada de pisos de segunda mano para jóvenes

La Generalitat destinará cien millones de euros anuales a un fondo para ayudar a los jóvenes a acceder a la compra de su primera vivienda, adelantándoles el coste de la entrada en condiciones favorables. Asimismo, creará una licencia básica para agilizar la construcción de viviendas protegidas de alquiler.

Estas actuaciones están incluidas en el plan de medidas urgentes para aumentar la oferta de vivienda protegida en Catalunya, aprobado este martes por el Govern.

Así se concreta cómo se cumplirá la promesa realizada por el president de la Generalitat, Salvador Illa (PSC), de construir hasta 2030 unos 50.000 pisos de este tipo, con una inversión de 1.100 millones de euros anuales.

Tras la reunión del ejecutivo catalán, la consellera de Territori, Habitatge i Transició Ecològica, Sílvia Paneque (PSC), explicó que, de esos 1.100 millones, 500 se destinarán a créditos para promotores de vivienda, otros 500 a ayudas para familias vulnerables, y los cien restantes a este fondo para facilitar la emancipación de los jóvenes.

La Generalitat calcula que, con los solares actuales destinados a vivienda protegida en Catalunya, se podrían conseguir terrenos para construir 20.000 viviendas hacia 2027-2028, según señaló la consellera en rueda de prensa.

Ayudas para la emancipación de los jóvenes

El Institut Català de Finances (ICF) gestionará la creación de este «fondo público de emancipación», que facilitará a los jóvenes la entrada para una vivienda de segunda mano, cubriendo aproximadamente el 20 % del coste, dentro de un límite establecido en condiciones favorables del mercado.

Así, los jóvenes que accedan a estas ayudas tendrán 30 años para devolver el importe concedido y solo deberán abonar los intereses. En caso de vender el inmueble antes de finalizar este plazo, deberán hacerlo por el mismo precio de compra, incrementado únicamente por el IPC.

Estos avales podrían beneficiar a unas 12.000 unidades familiares en cinco años. Para llevar a cabo esta iniciativa, la Generalitat creará un nuevo tipo de vivienda protegida denominada «vivienda de precio limitado».

Reserva de solares y licencias exprés de construcción

El plan de choque del Govern para construir más viviendas también contempla la creación de una reserva pública de solares, en la que ya se está trabajando en colaboración con entidades municipalistas.

Una vez que los terrenos estén inscritos en un registro concreto, la Generalitat prevé lanzar en febrero de 2025 una convocatoria pública para la promoción de viviendas, impulsando una línea de préstamos destinada a operadores públicos y privados con una dotación de 500 millones de euros anuales.

Para acelerar la construcción, se habilitará una especie de licencia exprés –licencia básica– para agilizar al máximo la promoción de vivienda protegida, de manera que se podrán iniciar obras de nueva planta o rehabilitación mientras se tramita el permiso urbanístico. La licencia básica podría otorgarse en un mes, lo que, según estimaciones de Territori, permitiría ahorrar hasta diez meses en la tramitación de la licencia definitiva.

Paralelamente, se fomentará la simplificación administrativa, en colaboración con el ámbito municipal, para reducir a la mitad el tiempo necesario para tramitar permisos de construcción.

Además, se impulsarán las modificaciones normativas necesarias para que los municipios puedan movilizar solares de equipamientos y destinarlos a viviendas de alquiler. También se llevará a cabo una convocatoria anual de alquiler garantizado a 50 años para edificios de obra nueva calificados como vivienda protegida.

El Incasòl, organismo dependiente de la Generalitat, intensificará la promoción directa de viviendas protegidas de alquiler y la transformación de suelo residencial con este objetivo, dotándolo de recursos para la adquisición de suelo destinado a este uso.