Niu es «una cooperativa de autoocupación que fusiona el arte de la artesanía textil y la ilustración para elaborar productos personalizados y realizados de manera sostenible y próxima», explica Noemí Ferret (Tarragona, 45 años), cofundadora junto a Rebeca Luciani (La Plata, Argentina, 45 años) de este proyecto emprendedor que empezó a andar el pasado mes de enero en Altafulla.
Reconocido en la pasada edición de los Premis Emprèn de la Diputació de Tarragona en la categoría de ‘Economia Social’, este proyecto ha sido becado en el Programa Tarragona Economia Social i Solidària (TESS) de Tarragona Impulsa y cuenta con el acompañamiento del Ateneu Coopcamp.
Noemí Ferret y Rebeca Luciani se consideran emprendedoras sociales, y defienden como irrenunciables los valores que impregnan su proyecto: sostenibilidad y proximidad. «Tan importante como el qué ofrecemos -defiende Noemí Ferret- es el cómo y el porqué».
Baberos, mochilas y mantas de juego son algunos de los productos que comercializanEn ese ‘cómo’ y ‘porqué’ está la reducción de la huella de carbono de sus productos, con telas de proximidad certificadas con el distintivo GOTS (Global Organic Textile Standard), «una certificación europea -explica Noemí Ferret- que acredita que el tejido se ha producido de manera responsable con el medio ambiente y en unas condiciones laborales dignas».
Cintas, hilos y otros materiales complementarios proceden también de Terrassa y Sabadell, mientras que las estampaciones de las telas se llevan a cabo en el polígono Riu Clar de Tarragona, la producción y confección (así como el material gráfico) en Altafulla, y la estampación de las cajas, con materia prima procedente de bosques sostenibles, se lleva a cabo en Barcelona.
Con una sólida experiencia como ilustradora, Rebeca Luciani se complementa en este proyecto con Noemí Ferret, procedente de la artesanía textil y especializada en productos infantiles. De los conocimientos acumulados por ambas surge, después del ‘cómo’ y el ‘porqué’, el ‘qué’: productos personalizados, con el foco puesto en la franja de edad hasta los doce años.
Su primera salida al mercado ha sido a través de packs de bienvenida para neonatos, bajo el nombre ‘El poble et dona la benvinguda!’, destinados a que los ayuntamientos los distribuyan entre las familias de los recién nacidos. Se trata de packs personalizados para cada municipio, en los que se incluyen hasta ocho productos (un babero, un muñeco de trapo, una mochila o una mantita de juego, entre otros). Altafulla y Creixell han sido sus primeros clientes, a los que se sumarán en breve Amposta y L’Espluga de Francolí.
La segunda línea de negocio en marcha lleva como nombre ‘Seguici popular il·lustrat’ y está destinada a la personalización de artículos textiles para colles castelleres, bastoners y diables, pero «también para cualquier asociación o entidad».
Tras este arranque entre ayuntamientos y entidades, el próximo mes de mayo será el momento de su salida al gran público, con la puesta en marcha de su tienda online y el lanzamiento del pack ‘El món et dona la benvinguda!’, destinado a que particulares puedan felicitar a recién nacidos con un producto personalizable (el pack incluye un libro para ir recopilando los recuerdos del primer año de vida, así como la posibilidad de personalizar algún artículo con el nombre y la fecha de nacimiento), con un precio todavía orientativo de venta al público de entre 100 y 150 euros.