«Emanciparse en España es una misión imposible». Así resumió ayer María Rodríguez, vicepresidenta del Consejo de la Juventud, el informe con el que este organismo analiza cada semestre cuántos jóvenes de 16 a 29 años y en qué condiciones consiguen abandonar el hogar familiar para marcharse a vivir por su cuenta.
Lo cierto es que el dato es demoledor. Solo el 18,5% de los jóvenes españoles, menos de dos de cada diez, vivían de forma independiente en el primer semestre de este año. Se trata de la tasa de emancipación más baja en 17 años, desde 2002, un porcentaje bajo hasta para un país que de forma habitual está a la cola de la UE en emancipación juvenil.
Las razones son las habituales, una juventud con las tasas de paro y precariedad laboral más abultadas del continente sumada a un país con una dificultad muy alta en el acceso a la vivienda. Pero en esta ocasión, lo que está marcando la diferencia, lo que termina por hundir la tasa, es una situación disparada de los precios del alquiler en los últimos años. Una realidad que resume perfectamente uno de los datos más llamativos del informe: el joven medio español necesita gastar todos los meses el 94,4% de su sueldo si intenta vivir solo en un piso de alquiler.
Las tasas de empleo, paro y temporalidad juvenil han mejorado algo desde 2016, con la salida de la crisis, pero aún así siguen siendo de dos a dos veces y media más altas que las de los españoles mayores de 34 años. El 54% de los trabajos jóvenes son temporales, el 26,8% a tiempo parcial y el sueldo medio es de 933 euros, muy poco más del salario medio interprofesional. Poca seguridad y estabilidad a la hora empezar una nueva vida, como demuestra que el 22% de los jóvenes que trabajan están en riesgo de pobreza.
Pese a que el 59% de los jóvenes emancipados en España vive de alquiler, los precios prohibitivos explican en buen parte por qué el 81,5% no pueden dejar la casa de sus padres. Los precios subieron un 7,84% en 2019, tras un 9% en 2018. De hecho, el esfuerzo de un joven para pagar solo un alquiler pasó de menos del 60% de su sueldo en 2011 al 94% en 2019, 35 puntos de ascenso. El gasto razonable en alquiler que puede hacer la media, 279 euros, queda muy lejos del alquiler medio, 880. Le daría para alquilar un piso de 25,4 metros, si es que lo haya en el mercado.
La compra no es mejor opción. Pagar una hipoteca media le costaría a un joven español el 62,4% de su sueldo mensual.