La afiliación a la Seguridad Social en la Costa Daurada superó el pasado abril, en un 6,4%, los niveles prepandémicos correspondientes al último trimestre de 2019, según se desprende del último informe elaborado por BBVA Research.
Según este informe, titulado Situación Cataluña 1r semestre 2022, en 2021 la economía catalana habría crecido un 5,2%. El impulso del turismo, la aceleración del gasto de los hogares y empresas catalanas, así como el avance de los servicios y el impacto de las políticas públicas habrían apoyado esta recuperación.
El dinamismo observado en el primer trimestre de 2022 se explicaría por la progresiva recuperación de los desplazamientos turísticos, favorecidos por la reducción de la incertidumbre sobre la salud y por la utilización del ahorro acumulado durante el confinamiento. El levantamiento de las restricciones a principios de año favorece el avance del sector turístico, y en particular del turismo interno que habría impulsado el consumo. Así, la primera Semana Santa sin restricciones tras la pandemia ha permitido una importante aceleración del gasto fuera de la provincia de residencia. En Catalunya, el gasto realizado con tarjeta de crédito o débito de BBVA, o en TPV de BBVA, por residentes del resto de España superó en más de un 20% el realizado en 2019. En concreto, el gasto presencial con tarjeta en el sector de restauración en abril se situaba más de un 50% por encima de los niveles de 2019.
Turismo internacional
Además, el gasto de 25, mayo, 2022 visitantes de otras provincias catalanas en Girona, Lleida y Tarragona habría superado el nivel precrisis el más de un 40%. También el turismo extranjero habría recuperado el nivel precrisis, aunque se habría visto condicionado por el menor avance del turismo urbano.
Asimismo, el mercado laboral se habría visto favorecido por la aceleración de la actividad. Según los últimos datos disponibles, el empleo muestra mayor dinamismo en las zonas más turísticas, mientras que en la ciudad de Barcelona y su entorno se ve limitado porque los flujos de visitantes están llegando con retraso.
El crecimiento continuará elevado durante los próximos dos años, aunque las sanciones impuestas a la economía rusa, el encarecimiento de la energía y de las materias primas y, la aceleración de la inflación limitarán el avance de la economía catalana. Además, en Catalunya el impacto de la guerra en Ucrania podría ser más elevado que en otras regiones españolas. Esto se debe a diversos factores.
Por un lado, el mayor peso en el PIB autonómico de las importaciones de energía, materias primas y semimanufacturas, cuyos mercados internacionales se están viendo más afectados por el conflicto.
Por otro lado, la relevancia del turismo ruso en Catalunya también explicaría el mayor efecto de la guerra en la economía autonómica. En concreto, antes de la pandemia, entre el 2% y el 3% de los visitantes llegados a Catalunya eran rusos mientras que en España eran casi la mitad. Además, en 2019 el gasto promedio de estos turistas en la comunidad catalana era el doble que el realizado en el conjunto de España.
Inflación y energía
El escenario de recuperación previsto para los próximos trimestres podría verse afectado por el aumento de la inflación debido, en parte, al elevado coste de la energía. El encarecimiento de los combustibles y de las materias primas también podría tener un impacto en el coste del transporte y en la producción de servicios, así como restar competitividad frente a otros distintos.
El efecto directo de la caída de la demanda en las economías de Rusia y Ucrania es limitado, ya que las exportaciones a estos dos países sobre el PIB catalán tienen un peso muy reducido. Sin embargo, el peso de las importaciones de productos intermedios o energéticos, cuyos precios se están viendo afectados por la guerra, se eleva hasta el 15% del PIB autonómico. Se estima que el aumento del precio del petróleo, un 30% mayor que el esperado hace seis meses, durante estos dos años, podría reducir en 1,3 puntos porcentuales el crecimiento medio anual. A esto, cabe añadir la menor demanda turística rusa.
Antes de la pandemia, el gasto de los turistas rusos se acercaba al 6% del gasto turístico de los extranjeros en Catalunya. Además, aún existe incertidumbre respecto a las inversiones asociadas a la ejecución de los Next Generation EU. En concreto, la utilización de los mismos para proyectos transformadores y de forma eficiente, y los plazos en los que se ejecuten estos proyectos, son esenciales para alcanzar una recuperación inclusiva y que no se dilate en el tiempo.
En todo caso, el sesgo sobre estas previsiones dependerá de las medidas públicas para paliar los efectos de la guerra sobre empresas y familias, así como del tiempo que se prolongue este contexto.