La derrota frente al Murcia tuvo efectos firmes en el once y la estructura planteada por Iñaki Alonso en Los Pajaritos. Hasta seis cambios de nombres propios realizó el técnico de Durango. Dani Parra, Alex Tirlea, Ander Gorodisti, Aarón Rey, Andy Escudero y Guillermo Fernández comparecieron en una alineación en la que se arroparon en un sistema de juego inédito con el entrenador vasco en el banquillo. Alonso recuperó el 4-4-2 habitual de Raül Agné en otro nuevo giro táctico, tratando de dotar de competitividad y mayor generación ofensiva al equipo. Ni que decir que no funcionó. El experimento fue de nuevo fallido. Ahora la duda es sí esta mañana, Alonso volverá a apostar por una nueva revolución para recibir al líder del grupo II de Primera RFEF, el Eldense.
Los movimientos en el once fueron hasta seis. Hubo jugadores que aprovecharon la oportunidad. Otros la tiraron por la borda. Hoy aquel examen puede tener consecuencias. Dani Parra fue el primer gran movimiento en el once. En este caso fue forzado porque el día antes el Nàstic anunciaba que Manu García era baja por unas molestias en el isquiotibial.
El portero de Riudoms fue sin duda la gran noticia en Soria. Paró dos penaltis y maquilló una goleada que podría haber sido mayor porque la defensa le dejó vendido durante muchos instantes. El tarraconense demostró estar a la altura de las circunstancias y dio un golpe en la mesa. La titularidad en el presente es complicada con la sombra de Manu, pero para el futuro no muy lejano hay portero de garantías. Alex Tirlea, que ya había coincidido con Alonso en el Alavés, no había gozado todavía de la titularidad en el Nàstic bajo los mandos del entrenador vasco. Pol Domingo había sido la opción elegida en los cuatro primeros partidos del nuevo técnico del Nàstic. Ante Los Pajaritos saltó la sorpresa porque era la única pieza de la línea defensiva que no repetía. El lateral rumano irrumpía ante el Numancia con la intención de recuperar su sitio. Fue un partido en el que dejó descaro ofensivo y ni mucho menos fue de los peores jugadores que estuvieron sobre el verde.
Una versión más gris ofreció Ander Gorostidi que sigue sin ofrecer ese rendimiento superlativo que se aventuraba con su llegada en verano. Es un jugador que sigue siendo inconsistente en su juego y que en Numancia sufrió el desorden que el equipo acusó en una segunda mitad para el olvido. De hecho, el mismo provocó el primer penalti que supondría el empate.
Tras recibir los tres goles en contra, Alonso le sacó del terreno de juego para dar entrada a Eric Montes que había sido el gran damnificado en la revolución en el once en la sala de máquinas. Nadie apuntaba a él para el banquillo y menos con la baja por sanción de Pedro del Campo, pero fue descartado para el once en un movimiento que rompió el equilibro grana en muchas fases del partido.
Aarón Rey y Andy Escudero fueron las novedades en las bandas del Nàstic. El gallego había sido titular en los cuatro primeros partidos de Iñaki Alonso, pero ante el Murcia se quedó en el banquillo. Tras una suplencia, el técnico grana volvió a confiar en él.
Le situó en el costado derecho y le alejó de la mediapunta. Rey falló el 0-2 en una mala definición ante el portero y volvió a dejar patente que debe mejorar de cara a puerta. En su juego dejó destellos de calidad unidos a una intermitencia en su juego que le penaliza.
Algo irregular se mostró también otra de las grandes novedades como fue en la derecha Andy Escudero. El zurdo actuó en el costado derecho y de sus botas nació el córner que peinaría Guillermo Fernández para el remate de Alex Quintanilla en el segundo palo que significaría el 0-1. Fue uno de los pocos detalles que dejó su pie izquierdo. El resto del partido fue un reflejo de su temporada en líneas generales. Posee talento para ser un futbolista diferencial, pero no está encontrando ni la confianza ni la regularidad en su juego para serlo.
La última novedad en el once fue la de Guillermo Fernández que entraba en la dupla ofensiva junto a Pablo Fernández por Marc Fernández. El vasco regresaba a la titularidad tras tres partidos seguidos como suplente. No marca desde noviembre y Soria no fue excepción. Sumó una asistencia, pero que quedaría en anécdota. Son ya muchos meses y partidos sin ver puerta y su rendimiento está alcanzando cotas preocupantes. Vive del gol porque es el arte que más domina y sin él sufre porque en otros aspectos del juego no tiene esa capacidad de brillo.
l La gran duda en el once del Nàstic hasta última hora será la presencia de Manu García en la portería. El guardameta sevillano no estuvo ante el Murcia por unos problemas en el isquiotibial que también han provocado que no se sepa hasta pocas horas antes del partido si podrá jugar o no ante el Eldense.