En una final todos los escenarios se contemplan y se trabajan. Eso está claro. Por eso el Nàstic ya estudia todos los contextos que se le pueden ir dibujando en la vuelta del sábado en el Nou Estadi Costa Daurada. La estampa en la que los de Dani Vidal no consiguen el ascenso no se vislumbra en ninguna de las mentes de la plantilla. Este es un escenario real, que puede suceder, pero que prefiere no imaginarse porque lo malo llega solo.
La plantilla al completo ya piensa en firmar una victoria que le dé el ascenso a la Segunda División. Este es el contexto soñado por todos. No se habla ni siquiera de remontada porque es una palabra que define algo más grande.
Al Nàstic le vale simplemente con ganar y eso es algo que ha acostumbrado a hacer durante la temporada. Por eso hay optimismo por los cuatro costados. Toca confiar porque hay motivos para ello.
El Nàstic conseguiría el ascenso a Segunda División si se dan 13 de los 21 resultados que se han desarrollado a lo largo de la temporada como local. Son los 13 partidos en los que los granas se llevaron los tres puntos y consiguieron la victoria en el Nou Estadi Costa Daurada.
Esta es la noticia más positiva de todas, pero si se repasan estos triunfos de manera más exhaustiva se saca una conclusión, o mejor dicho, un escenario hipotético con muchos tintes de convertirse en realidad, y es que la prórroga puede hacer acto de presencia.
De las 13 victorias cosechadas por el Nàstic, solo en cuatro de ellos conseguiría el ascenso de manera directa tras el final de los 90 minutos. El 2-0 ante el Sabadell, el 3-0 ante el Cornellà, el 3-0 ante la Cultural Leonesa y el 2-0 frente al Lugo serían los cuatro marcadores en el Nou Estadi que llevarían al Nàstic a Segunda División, evitando el sufrimiento de la prórroga.
Por lo tanto, se sacan dos lecturas evidentes. El Nàstic puede ser optimista con la estadística en la mano, pero también debe saber que la prórroga podría ser un contexto que aparezca. Allí el aspecto físico, emocional y los cambios serán tres factores diferenciales que ya se trabajan.
Por si les faltan estadísticas, hay otra más en otro caso del Málaga, de las cuatro derrotas que han sufrido fuera de casa los de Sergio Pellicer, todas ellas han sido por la mínima, por lo que sería un resultado suficiente que les permitiría arañar un tiempo extra en el que jugárselo todo.